Con base en los resultados y el balance de la organización electoral de los pasados comicios, el país podrá acudir a las elecciones de 2024 con el actual marco legal, sostuvo el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova. “¿Es pertinente una reforma electoral? Sí, si sirve para mejorar y robustecer lo que hoy tenemos; vuelvo a insistir, no es indispensable ni necesaria”.
Advirtió que de considerarse la reforma deberá cuidarse que no se convierta en una contrarreforma y su aprobación deberá contemplar tres condiciones: que parta de un diagnóstico, porque si algo funciona, mejor no lo arregles, porque puedes descomponerlo; que se apruebe con un amplísimo consenso, pues de lo contrario puede generar problemas frente a sectores que estén en desacuerdo y que sea una reforma electoral congruente con la transición democrática de los pasados 30 años.
Durante su participación en un foro de la Asociación Nacional de Magistrados Electorales, Córdova aseveró que el INE se encuentra ya involucrado en la organización de la consulta popular. Admitió que ante la negativa de los tres poderes involucrados –Ejecutivo, Legislativo y Judicial– de brindar al instituto recursos extra para financiarla, se tendrá que circunscribir a 57 mil mesas receptoras para adecuarla a los 522 millones de pesos con que contaba el instituto electoral.
“No es la consulta que el INE hubiera querido hacer, el instituto hubiera querido una consulta con 104 mil mesas de votación y el costo de la consulta se habría elevado a mil 499 millones, pero la Cámara de Diputados negó los fondos. En pláticas con la Secretaría de Hacienda planteamos un ejercicio un poco más reducido con 91 mil mesas de votación que habría costado 890 millones, la Secretaría de Hacienda nos negó los recursos”.
Córdova anticipó que entre los desafíos que enfrentará el organismo está la organización de las votaciones relacionadas con la revocación del mandato, en torno a las cuales hay varios dilemas que resolver. De entrada, en la consulta de agosto próximo se lograron abatir costos porque se utilizará a los mismos ciudadanos que ya participaron en la elección y se reciclarán algunos materiales.
“Pero para 2022 nada de esto tendremos. El próximo año será un ejercicio electoral desde cero”, porque los vacíos legales, los puede subsanar el INE, pero no cuando no existe una ley reglamentaria.
“Hoy hay más interrogantes respecto a la revocación de mandato que certezas. Incluso, hay una interrogante jurídica: el presidente López Obrador fue electo por seis años, así se expresó la voluntad ciudadana el primero de julio de 2018, ¿es válido que un mecanismo posterior como la revocación de mandato, que se introdujo en la Constitución en 2019, se elija retroactivamente?”, cuestionó.