Luego de que la Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados hiciera un llamado a la Federación Mexicana de Futbol (FMF) para que se desistiera de su supuesta intención de hacer que la selección femenil pague parte del castigo impuesto por la FIFA a consecuencia del grito homofóbico, el titular del organismo, Yon de Luisa, aseguró que no se pretende perjudicar a dicho representativo tricolor.
El pasado 19 de junio se dio a conocer que el ente rector del futbol mundial sancionó a la selección nacional con dos partidos oficiales como local a puerta cerrada, además de una multa económica de más de un millón 343 mil pesos, luego de que se escuchara en dos encuentros del torneo preolímpico de la Concacaf el grito “¡eeeh, puto!” por parte de la afición mexicana.
No obstante, la FIFA no especificó qué combinado nacional tendría que pagar dicho castigo.
Ante la situación, trascendió que la FMF preguntó al organismo si la reprimenda era exclusiva para el Tricolor mayor o si incluía a otras categorías, como la femenil.
Rechaza intención de afectar al Tri femenil
“La FMF se encuentra a la espera de que la FIFA determine los partidos en donde aplicará la sanción recibida, proceso en el que la Federación no tiene ninguna injerencia. Por lo anterior, rechaza categóricamente que esté buscando afectar a la selección nacional femenil”, indicó De Luisa en una carta enviada el pasado 5 de julio a la diputada Dulce María Sauri Riancho, presidenta de la mesa directiva de la Cámara de Diputados.
“Lamentamos la confusión que el encabezado falso de un medio generó. En la FMF compartimos con la Comisión de Igualdad de Género la importancia de empoderar a las mujeres, aquilatando y asumiendo con responsabilidad el poder de convocatoria que tiene nuestro deporte”, agregó el dirigente.
La Federación todavía está en espera de la respuesta de la FIFA concerniente al castigo. En caso de que el órgano rector del futbol mundial determine que la sanción puede ser pagada por cualquier categoría de la selección mexicana, aún existe la posibilidad de que el Tri femenil juegue un partido oficial a puerta cerrada.