Para escribir Red Border, libro con el que se hizo acreedor al Premio Nacional de Poesía Tijuana 2020, el poeta michoacano Armando Salgado recurrió a su historia y la de su familia, así como a la realidad de su estado natal respecto de la migración.
Es una obra que ronda por fronteras visibles e invisibles; entre estas últimas están la infancia, los recuerdos, las historias que se comparten en familia, viajes para llegar a otro punto específico, explicó el autor en la presentación del volumen, en la Casa Taller Alfredo Zalce, en Morelia.
El acto consistió en una mesa redonda, presencial y virtual, con la participación del poeta de origen colombiano Jorge Bustamante García y la escritora Carolina Toro, además del autor.
“Es un libro que habla de circunstancias y experiencias reales; al mismo tiempo representa un viaje extremo que permite cruzar límites íntimos y regresar hacia nosotros para preguntarnos, a través de la lectura, quiénes somos, de dónde provenimos y por qué estamos aquí”, explicó Salgado.
Destacó que gusta de escribir a partir de y sobre la experiencia, y que justo es desde ella, y de la realidad, que en el citado volumen observa el fenómeno migratorio, más allá de la bibliografía y otras fuentes.
“Michoacán es un estado con muchos migrantes. Se dice que en Estados Unidos hay más de 4 millones y medio de michoacanos. Me sorprende que tengo tíos que están allá, a quienes no veo desde hace más de 30 años, o que mi abuelo tenga una hija a la que no ha visto desde hace más de 50 años”, indicó.
“Escribir sobre esa realidad no fue difícil, porque está en mi familia. Trato de escribir sobre situaciones y problemáticas que me son muy cercanas y que detonan en mí, desde el arte, esa posibilidad de tener otras lecturas de la vida.”
El también narrador, nacido en Uruapan, en 1985, aclara que para este libro se concentró en poemas cortos que retrataran esa arista de su realidad y la de otras personas.
“Una característica del poema es que retrata al individuo, pero al mismo tiempo a los colectivos. Aunque sea un texto corto y no tenga métrica, pero sí sonido y ritmo, cumple con un mensaje, con una detonación”, concluyó.