En el flanco progresista hay muchísimos que pueden sustituirme, “como Claudia (Sheinbaum), como Marcelo (Ebrard), Juan Ramón de la Fuente, Esteban Moctezuma, Tatiana Clouthier, Rocío Nahle”, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador. En su conferencia de prensa matutina adelantó que va “a crear una nueva corriente de pensamiento para tener una sociedad mejor”.
También descartó extender su mandato y bromeó, pues “mis adversarios, yo creo que tienen razón en eso, de que ya estoy chocheando, entonces no podría más tiempo”. Entre los diversos temas que abordó también extendió su compromiso para no intervenir en Morena, pero debe “ser consecuente y devolverle al pueblo la bondad que el pueblo ha ofrecido”.
Se dio tiempo para reprochar la sesgada política informativa de los medios de comunicación nacionales y extranjeros. Es necesaria –dijo– una revisión a fondo para que el periodismo sea lo más profesional posible, más cercano a la gente y lo más distante al poder. Puso como ejemplo lo sucedido en la cobertura de la tragedia de la línea 12 del Metro y el desplome de una torre de departamentos en Florida.
“A mí me gustaría, con todo respeto, que se metieran con un reportaje ahora que se cayó el edificio en Florida. Si yo gobernara Florida, yo no hubiese dinamitado el edificio. Y nadie allá dice nada. No es un asunto nada más técnico, es un asunto humano, ¿cómo se rescatan 25 cuerpos pero se declaran desaparecidos 120?”
La comparecencia diaria ante los medios fue prolija en temas particulares. Declaró que la figura política del tapado, cuyo origen se remonta a Porfirio Díaz y su compadre Manuel González, feneció con su llegada a la Presidencia.
De buen humor, al inicio de su conferencia López Obrador recordó que no le cruza la idea de la relección: “yo soy el Presidente de más edad en la historia de México, el Presidente constitucional de más edad. No me lo permitirían mis convicciones”.
Al referirse a su partido, adujo que ha sido muy respetuoso de Morena, “como también lo he sido de las decisiones que se toman en otros partidos. Yo tengo la tarea de gobernar para todos y si me meto en esto del cuestionamiento al bloque reaccionario, conservador, corrupto, es porque abiertamente ellos se propusieron frenar el proceso de transformación por el cual llegué a la Presidencia.
“Entonces, cuando estos señores se sinceran –para decirlo elegantemente– y dicen: ‘Vamos a unirnos todos en contra del dictador, del comunista’, en el fondo su propósito es dejar sin presupuesto a los pobres. Por eso hablo de que son clasistas, son racistas y, desde luego, también partidarios de la discriminación.”
El mandatario se defendió de los ataques de sus adversarios “conservadores corruptos; le llaman a esto populismo, paternalismo. No me importa que nos etiqueten de esa manera porque es un cuento, es una simulación, un engaño. Y también en política no se puede quedar bien con todos. En política hay que representar algo y a alguien, y no andar zigzagueando”.
Expuso que a su paso por el poder presidencial “vamos a crear una nueva corriente de pensamiento para tener una sociedad mejor, inspirada en lo mejor de nuestra historia nacional. Para qué vamos a ir a buscar modelos al extranjero o dirigentes o héroes al extranjero. ¡Nuestros adversarios, los conservadores, querían el fin de la historia! En lo que se han equivocado también nuestros adversarios en México es que querían trasladar la forma de gobernar de ahora a una dictadura”.