Después de siete días de plantón en la sede nacional del Partido Revolucionario Institucional, militantes inconformes con la gestión de su dirigente, Alejandro Moreno Cárdenas, lo levantaron sin acuerdo alguno “como un gesto de buena voluntad”.
Encabezados por el ex gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, y Nallely Gutiérrez, los quejosos criticaron la gestión de Alito, a quien adjudicaron los malos resultados en la pasada contienda electoral y el retroceso registrado en los estados que tenía su partido hasta antes de los comicios del 6 de junio, cuando les arrebataron las ocho gubernaturas que mantenía y que estaban en disputa.
En un comunicado hecho público tras retirarse, los inconformes esperan que próximamente se convoque a la renovación de la dirigencia nacional de su partido, ante el fracaso de la gestión que encabeza el ex gobernador de Campeche en el PRI, y comentaron que analizarán nuevas acciones para exigir que se modifique la situación por la que atraviesa el priísmo.