Buenos Aires. Una singular protesta con instalación de carpas en la histórica Plaza de Mayo frente a la casa de gobierno comenzó este martes aquí en protesta por los dos mil días que lleva presa desde el 16 de enero de 2016 la dirigente social Milagro Sala, en la provincia de Jujuy, organizada por el Comité de solidaridad que lleva su nombre y la organización social Tupac Amaru que lidera y en la que participan otras organizaciones sociales y políticas, para exigir su libertad y la de sus compañeros y compañeras, a los que consideran presos políticos, detenidos por órdenes del gobernador Gerardo Morales.
El próximo 9 de julio, el día en que se conmemora la independencia de Argentina, habrán transcurridos dos mil días en que Sala y otros nueve militantes de la Tupak Amaru están detenidos, injusta y arbitrariamente.
Milagro Sala, quien había sido elegida como diputada del ParlaSur, cargo que no pudo asumir fue detenida a días de que asumiera el 10 de diciembre de 2015, el gobernador Morales, cuando militantes de la Tupac Amaru realizaban una protesta pacífica durante días frente a la sede gubernamental de la capital jujeña, ya que advertían serias amenazas contra su organización y pedían una cita con el gobernador.
La líder social hizo realidad uno de los proyectos más importantes en esa provincia de características semifeudales, construyendo casas para los sectores más empobrecidos, conformando varios barrios que además tenían escuelas, centros de salud y un lugar para juegos donde se instaló una piscina.
Fueron muchas las familias que por primera vez tuvieron una casa, construídas por ellos mismos organizados en cooperativas durante el gobierno de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en esa provincia donde la pobreza y la discriminación hacia los campesinos y los pueblos originarios es extrema.
Este proyecto trascendió las fronteras. Pero Morales comenzó casi de inmediato la persecución contra la dirigente y su organización, ya que tiene la justicia bajo su control, como ha sido denunciado y demostrado.
A partir de ese momento se dedicó a armar causas contra la dirigente social y si la justicia actuara como tal, hubieran sido desestimadas por ausencia de pruebas y manipulaciones de todo tipo. Fue el comienzo de la “cacería” de opositores del peronismo y de la implantación de lo que sería la judicialización de la política conocida en estos tiempos como lawfare.
Sala y varias compañeras y compañeros de Tupac Amaru fueron detenidos; en la cárcel de alta seguridad de mujeres de Jujuy las detenidas sufrieron malos tratos y torturas. La intervención de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sólo pudo lograr que se la enviara a prisión domiciliaria.
Alejandro Garfagnini, coordinador nacional de Tupac Amaru, sostuvo que irán agregando una carpa por cada día de los que ha vivido detenida Milagro y también por sus compañeras y compañeros. A esta protesta también se unió la demanda de libertad para otros detenidos durante el gobierno de Mauricio Macri en forma ilegal como es el caso del también dirigente social Luis D’ Elia.
Morales hizo responsable a Sala de una protesta donde le arrojaron huevos, en la cual no estaba, pero fue condenada a tres años de prisión. El mes pasado un tribunal oral de Jujuy a pedido del gobernador la condenó por este mismo hecho, pero agregando los supuestos delitos de daño agravado y amenazas coactivas, en calidad de instigadora, poniéndola al borde de volver a la cárcel, con otros tres años.
Esto colmó la gota que derramó el vaso. La Plaza de Mayo estaba cubierta este martes de carpas. “Milagro inspiración de los más humildes”, dice uno de los carteles escritos a mano por los acampantes.Suena música de cumbia, entre bombos y tambores, mientras las banderas de las distintas organizaciones ponían un color vivo en la grisedad del atardecer invernal. Habrá una serie de actividades y debate cada día. A partir de este miércoles se realizarán debates en la carpa que lleva el nombre de Milagro Sala y hay otras destinadas a cuidar la salud de los que acampen y para la prensa bajo el nombre del heroico periodista Rodolfo Walsh, desaparecido durante la pasada dictadura militar.
Los dirigentes sostienen que este “acampe” ayudará a volver a organizar la militancia “para darle fortaleza necesaria al gobierno” y que “tome las decisiones que tenga que tomar, enfrentando a los poderosos y beneficiando a los humildes de esta patria”, como dijeron a Página/12.