Cajeme, Son., Al menos 465 agentes afiliados al Frente Unido Profesional (Fupac) se inconformaron por la forma en que autoridades asignaron los grados y niveles dentro de la coorporación de seguridad, y amenazaron con dejar “un día sin policías” a Cajeme, el cuarto municipio más violento de México, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Pública.
Además, denunciaron actos de corrupción del jefe policiaco Cándido Tarango Velázquez y del alcalde de Morena, Sergio Pablo Mariscal.
Ernesto Valenzuela, líder del Fupac, aseguró que de no tener claridad en el reparto de grados y niveles, unos 500 elementos de la asociación efectuarán un paro y dejarán sin vigilancia al municipio (con más homicidios en Sonora), hasta que sus demandas sean resueltas.
“Nos vamos a manifestar antes de que dejen el cargo el actual edil, Sergio Mariscal Alvarado, y el capitán Cándido Tarango; les vamos a reclamar legalmente qué pasó con los grados que se supone se iba a entregar por medio de una convocatoria que se publicó en la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Cajeme”, puntualizó en entrevista para La Jornada.
Detalló que legalmente la entrega de grados estaba fechada para el primer día de marzo de este año; sin embargo, las autoridades les solicitaron información personal y a la fecha no se les ha brindado una respuesta, ni se ha dado a conocer los nombres de los elementos activos que recibirán el nuevo grado.
Los uniformados acusaron al capitán Tarango de corrupción y “de mentirle a la tropa”, pues los grados se entregarán a quien pague por ellos, ya sea de manera ilegal o bien, a los allegados de altos mandos, que es donde aseguran se concentra la corrupción de la corporación.
Apuntaron que han buscado diálogo con el edil electo de Morena, Javier Lamarque Cano, a fin dialogar, para resolver el problema.