Goiania. Lionel Messi está decidido a ganar un título con Argentina, como nunca antes.
El capitán anotó de tiro libre y dio dos asistencias este sábado, para la goleada 3-0 sobre Ecuador, que le permitirá a la Argentina jugar la semifinal de la Copa América por cuarta edición consecutiva. Enfrentará a Colombia el martes en Brasilia.
Rodrigo De Paul abrió la cuenta a los 39 minutos, Lautaro Martínez amplió a los 84, y Messi hizo el tercero a los 90 en el estadio Olímpico de esta ciudad por los cuartos de final del certamen.
La albiceleste, que busca quebrar una racha de 28 años sin títulos, se fue al descanso con la ventaja mínima tras un primer tiempo en el cual contó con las ocasiones más claras, pero también pudo pagar caro algunos desajustes defensivos que expuso el inteligente planteo del entrenador argentino de Ecuador, Gustavo Alfaro.
“La verdad que era un partido muy duro, sabíamos de la dificultad de Ecuador, que es un equipo muy trabajado… Y fue peleado hasta que encontramos el gol”, comentó Messi.
Una de las ocasiones más claras fue protagonizada por el capitán Messi a los 22 minutos, cuando interceptó un pase retrasado del ecuatoriano Carlos Gruezo y cara a cara con el arquero Hernán Galíndez definió de zurda, pero el palo le frustró el gol. Previamente estuvieron también cerca de convertir el artillero Lautaro Martínez, en dos ocasiones, y el zaguero Germán Pezzella.
Hasta que Messi, que en la última semana quedó libre del Barcelona y todavía no definió su futuro, vio un hueco entre los centrales rivales y dejó sólo a Nicolás González de cara al arco. El arquero Galíndez salió a cortar y se llevó por delante al argentino.
Le pelota le quedó otra vez a Messi, que vio a De Paul en el punto de penal, hacia donde dirigió su pase certero. El mediocampista del Udinese de Italia paró la pelota y definió de derecha.
Ecuador, que nunca le ganó a la Argentina en 16 cruces de Copa América, atacó a su rival por las dos bandas y forzó errores en la última línea argentina.
El capitán Enner Valencia desbordó por derecha y tocó al medio para Jhegson Méndez, que le pegó de primera con el empeine y obligó al arquero Emiliano Martínez a un gran esfuerzo para evitar la caída.
Luego, en un avance por izquierda, Martínez salió a cortar un centro y pasó de largo. Valencia la peinó al gol, pero el balón se fue desviado.
Como se le ha hecho costumbre en el torneo, Argentina tiene la tendencia a ceder el protagonismo en el segundo tiempo como si sintiera el desgaste al que somete a sus rivales en la parte inicial. En los pasajes de más zozobra el arquero Martínez dio la talla.
A los 57 minutos Valencia obligó otra vez al guardameta del Aston Villa, que la mandó al tiro de esquina.
En el peor momento, apareció otra vez Messi para llevar calma. El astro recuperó la pelota en campo rival y tocó de una para Martínez, que liquidó el pleito.
Y en el epílogo, Messi ejecutó un formidable tiro libre de zurda que cerró el triunfo argentino. Fue su gol 76 con Argentina y quedó a uno de igualar el récord de Pelé como máximo artillero de un seleccionado sudamericano.
“Los premios individuales son secundarios, estamos acá por otra cosa, felicitar al grupo por el trabajo que está haciendo”, enfatizó el astro.