El tipo de cambio en México cerró la primera mitad del año con una apreciación marginal de 0.01 por ciento respecto del cierre de 2020, a 19.9380 pesos por dólar espot, según datos del Banco de México.
Durante los primeros seis meses del año, la moneda mexicana cotizó entre un máximo de 21.4430 pesos por dólar el 8 de marzo y un mínimo de 19.6070 unidades el 20 de enero.
El banco central estadunidense (Reserva Federal, Fed) está detrás del fortalecimiento del dólar a nivel mundial en el primer semestre de 2021, por lo que el balance del peso mexicano frente a esa divisa fue mixto, debido a la aversión al riesgo por una mayor inflación, tiempos de política monetaria y restricción de liquidez, explicó Carlos Quiroga, analista de Masari Casa de Bolsa.
Después de ubicarse en su peor nivel en tres meses, la moneda mexicana borró todas las pérdidas apoyada por tres elementos: los mensajes acomodaticios (de seguir con la liquidez) de Jerome Powell, presidente de la Fed, en el Congreso estadunidense, la decisión del Banco de México de subir su tasa de interés de fondeo a 4.25 por ciento y el acuerdo bipartidista para un programa de infraestructura en Estados Unidos.
Jorge Gordillo, director de análisis económico y bursátil de CIBanco, explicó que para la mayoría de los operadores de tipo de cambio, las presiones inflacionarias por sí solas no serían suficientes para pensar en ajustes a la tasa de fondeo antes de lo previsto, pero esta perspectiva cambiaría si se combina con mejoras continuas en la creación de empleos en Estados Unidos, lo que presionaría al peso mexicano arriba del nivel sicológico de 20 unidades.
IPC cae 1.2% en junio
El índice de precios y cotizaciones (S&P/BMV IPC) retrocedió ayer 0.09 por ciento, para ubicarse en 50 mil 289.75 puntos, registrando una caída de 1.2 por ciento en junio.
Aunque el histórico saldo de Wall Street (mercados estadunidenses) no pudo repetirlo el IPC, la ganancia, en lo que va del año, de 14.1 destaca favorablemente ante mercados como Francia o Alemania, también con ganancias de doble dígito.
El índice accionario logró un nivel máximo de 51 mil 427.64 unidades el 7 de junio, niveles no vistos desde agosto de 2017, pero necesitó más catalizadores para repuntar.
“El mercado accionario está en un proceso de consolidación, debido al nivel de valuaciones financieras. Si bien la relación precio/utilidad se encuentra en su promedio de los últimos cinco años, el tema de riesgo-inflación e incremento de tasas están haciendo más gradual el alza de las acciones por tema de valuación financiera”, precisó Quiroga.
