El PRD requiere una reforma a fondo y no sólo de fachada, pues aunque conservó su registro como partido nacional, lo perdió a nivel local en alrededor de 20 estados, manifestó Miguel Alonso Raya, integrante de la cúpula de esta fuerza política. Reconoció que en las elecciones recientes, el partido del sol azteca sufrió un fuerte golpe. De 3 millones de votos que tuvo en los comicios antepasados, pasó a 1.7 millones.
A los 10 estados donde ya no tenía registro local, se sumaron en junio alrededor de 10 más, entre ellos Tamaulipas, Coahuila, Nuevo León, Chihuahua, Sonora, Sinaloa y Baja California.
El ex diputado recordó que la última fracción parlamentaria más grande que tuvo el PRD fue la de la 62 legislatura cuando alcanzó 104 diputaciones, pero, a partir de ahí, el número de curules en su poder ha ido en declive. En la 63 legislatura tuvieron 40 diputaciones, en la 64, 22 y en la entrante tendrán 15.
Alonso Raya consideró que la dirigencia perredista hizo diversos esfuerzos para obtener un mejor resultado, pero si “trabajando no se pudo tener un buen resultado, significa que algo está fallando y tiene que revisarse”.
Resaltó que, el año pasado, el PRD tenía prevista la realización de un congreso en el que se revisaría el programa y los estatutos, pero hubo resistencias, y con la pandemia, la discusión se postergó. El ex diputado urgió a realizar una reforma a fondo del partido del sol azteca. Si no se hace y “te atienes a las inercias, eso no va a servir de mucho para más adelante”.
En entrevista, el perredista estimó que no sólo esta fuerza política debe reformarse, sino todos los partidos, incluido Morena, si ven como diagnóstico los altibajos de los resultados del 6 de junio.