La reserva de la biosfera Islas Marías podrá recibir turismo de bajo impacto ambiental, sin la posibilidad de que los visitantes puedan pernoctar en el sitio ni se permitirá nueva infraestructura. Tampoco se podrá pescar ni hacer visitas al arrecife coralino, señala el proyecto del plan de manejo desarrollado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
El borrador del texto, a consulta en la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria, indica que en el ex centro penitenciario “se permite un tipo de turismo que es compatible con la conservación y protección de los ecosistemas, se realizará en la subzona de aprovechamiento sustentable donde los recursos naturales pueden ser usados”.
Precisa que las actividades turísticas se harán en la subzona de asentamientos humanos, donde se localizaba el antiguo campamento Puerto Balleto, donde se ha modificado o han desaparecido los ecosistemas originales debido al desarrollo de asentamientos humanos. En esta condición se encuentra 2 por ciento de la Isla María Madre, indica.
Agrega que, debido a que actualmente existen instalaciones suficientes para el turismo, no se permitirá la construcción de nueva infraestructura para evitar el cambio de uso de suelo, “pues ello implica la pérdida de vegetación, desplazamiento de fauna, fragmentación de los ecosistemas o afectación al paisaje”.
Indica que el mantenimiento o remodelación de “ninguna manera podrá implicar el cambio de uso del suelo”, debe tener como finalidad la conservación del área natural protegida para evitar la afectación de los ecosistemas.
El 27 de noviembre de 2000 se declaró reserva de la biosfera el archipiélago Islas Marías, ubicado en el océano Pacífico, e integrado por las islas María Madre, María Magdalena, María Cleofas y San Juanito, así como su respectivo territorio marino.
La Conanp argumenta que este plan de manejo es para que el lugar “funcione adecuadamente como un centro para el aprendizaje y conservación de la naturaleza, a la vez que se convierta en un espacio de regeneración y esperanza para jóvenes mexicanos como lo es el Centro de Educación Ambiental y Cultural Muros de Agua-José Revueltas”.
El documento agrega que para evitar la degradación por acumulación de residuos sólidos, incluyendo la formación de islas de basura en los cuerpos de agua, se restringe la introducción de materiales como popotes y bolsas de plástico, entre otros.