Un grupo de trabajadores de salud de diferentes instituciones protestaron esta tarde frente a Palacio Nacional para exigir mejores condiciones laborales y la basificación de todo el personal a nivel nacional, sin la intervención de líderes sindicales.
Victoria del Carmen Pérez, radióloga de la clínica Especializada Condesa-Iztapalapa, señaló que “son más de 86 mil compañeros en todo el país”, algunos con antigüedad de hasta 20 años, que han laborado con contratos por honorarios o eventuales de uno a tres meses, sin prestaciones económicas, sociales, con bajos salarios y en condiciones precarias.
Indicó que en esta situación se encuentra personal de los institutos de Salud para el Bienestar (Insabi); de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) y Mexicano del Seguro Social (IMSS), a quienes, incluso, “les retrasan los pagos hasta tres meses”.
“Hay muchos que no tienen aguinaldo, algunos no les dan vacaciones, les cortan los contratos, son despedidos injustificadamente; no cotizamos en el Issste, prácticamente no estamos generando ningún tipo de antigüedad”, comentó en entrevista.
Ante esta situación, los trabajadores solicitaron al presidente Andrés Manuel López Obrador y al secretario de Salud federal, Jorge Alcocer Varela, para que “intervengan” y reanuden el programa de basificación, respetando su antigüedad laboral y sin la intervención de la representación sindical, “porque como sabemos anteriormente entregaban estas plazas a sus allegados”.
Agrupados en el Movimiento de Trabajadores de Servicios de Salud por la Basificación -con representación en 24 estados del país-, los inconformes se manifestaron frente a Palacio Nacional y por unos minutos cerraron la circulación en la Plaza de la Constitución. Pérez comentó que la protesta tuvo réplica en más entidades de la República.