En el contexto del Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura, que se conmemora hoy, la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) destacó que el país aún tiene retos importantes en transparencia y rendición de cuentas sobre el combate a este flagelo.
“Resulta en particular preocupante que, a cuatro años de la publicación de la ley general contra la tortura, autoridades federales y locales hayan incumplido con su obligación de crear y operar el Registro Nacional del Delito de Tortura”, herramienta para la investigación y transparencia sobre su recurrencia, expuso Guillermo Fernández-Maldonado, representante en México de la ONU-DH.
Asimismo, señaló, “está pendiente la publicación del Programa Nacional para Prevenir y Sancionar la Tortura” por parte de las autoridades federales. Ante ello, en un comunicado, llamó a garantizar el derecho a la verdad que tienen las personas sobrevivientes y la sociedad mexicana en general.
También Fernández-Maldonado reconoció la declaración pública que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador respecto a que la tortura no será una práctica tolerada en su administración, así como su llamado a las instituciones del Estado a evitar incurrir en esta grave violación a los derechos humanos. Ahora corresponde, indicó, que esta importante declaración se traduzca en información y datos claros.
Destacó que la ONU-DH ha acompañado la iniciativa civil del Observatorio contra la Tortura, a través de la cual se ha podido constatar que muchas autoridades a escala nacional no tienen sistematizada la información sobre incidencia de la tortura y las medidas para erradicarla.