Ámsterdam. Aún montada sobre una ola emocional Dinamarca logró un nuevo triunfo en la Eurocopa.
Y ganó a lo grande en un estadio donde se sienten como locales.
Los daneses pasaron a cuartos de final de Euro 2020 al golear 4-0 a Gales, con dos goles de Kasper Dolberg exactamente dos semanas después de que Cristian Eriksen sufrió un paro cardíaco en el campo durante el primer partido del equipo. Lo resucitaron con un desfibrilador y pasó varios días en el hospital antes de regresar a su casa.
Eriksen y Dolberg jugaban para Ajax, el equipo local en la Arena Johan Cruyff. Muchos de los 16 mil espectadores alentaron a los daneses.
“Es como jugar de local”, dijo Dolberg. “Este estadio es muy especial para mí, es fantástico”.
El entrenador Kasper Hjulmand dio a Dolberg su primera titularidad en el torneo y éste respondió con un gol en cada mitad. Joakim Maele anotó el tercero a los 88 minutos y Martin Braithwaite puso cifras definitivas al marcador en tiempo de descuento.
A los 27 minutos, Dolberg recibió un pase de Mikkel Damsgaard y corrió hacia el centro para rematar al ángulo. Aumentó la cuenta a los 48 con un disparo rasante tras recoger un mal despeje de Neco Williams.
Frente a un Gales cada vez más desarmado, Maehle puso el 3-0 al vencer al portero Danny Ward con un poderoso remate que efectuó con tiempo de sobra para controlar el balón y disparar. El gol de Braithwaite fue anulado por fuera de juego, pero confirmado después de la revisión del video.
Harry Wilson fue expulsado a los 90 por una infracción contra Maehle.
Los daneses enfrentarán a Holanda o República Checa en cuartos de final el sábado próximo en Bakú.
Gales tuvo la oportunidad de abrir el marcador a los 10 minutos, pero el remate de su capitán Gareth Bale salió apenas desviado. Volvió a rematar desviado dos minutos después en el intento de poner fin a una sequía de goles en competencias internacionales que ya lleva 15 partidos.
Bale fue una de las estrellas del equipo que llegó a las semifinales en Euro 2016 en Francia.