París. La ultraderecha francesa de Marine Le Pen sufrió un revés ayer en la primera vuelta de los comicios regionales, donde la oposición de derecha consiguió una cómoda victoria, a menos de un año de la elección presidencial.
A nivel nacional, el partido de derecha obtendría 29 por ciento de los votos, por delante de la ultraderecha (18.5 por ciento) y de los socialistas (18 por ciento), según varios sondeos.
La República en Marcha (LREM), partido del presidente Emmanuel Macron, sufrió también una severa derrota y sus probabilidades de ganar una región son casi nulas.
Con apenas cuatro años de existencia, la formación centrista de Macron no ha logrado consolidarse a nivel local, no obstante puede ser decisiva de cara a la segunda vuelta para impedir el ascenso de la extrema derecha.
“No voy a andarme con rodeos: sí, por supuesto que estamos decepcionados por haber conseguido este resultado”, declaró el jefe del partido presidencial, Stanislas Guerini, a la radio RTL.
LREM esperaba obtener 15 por ciento de los votos, quizá más en algunas regiones, como predecían algunas encuestas optimistas. Pero el partido del presidente sólo convenció a 10 por ciento de los votantes.
Peor aún, queda eliminado de la segunda vuelta en Occitania, Auvergne-Rhône-Alpes y, sobre todo, en Hauts-de-France, donde el ministro Laurent Pietraszewski obtendría apenas entre 7.3 por ciento y 9.1 por ciento, a pesar de la presencia de otros cuatro miembros del gobierno en su lista.
Xavier Bertrand (derecha), obtuvo entre 39 y 46 por ciento de los votos, muy por delante de la ultraderecha; esta victoria será su plataforma de lanzamiento para la campaña presidencial.
Aunque el Ejecutivo siempre ha insistido en que no se sometería a los resultados, la cuestión de una remodelación ministerial vuelve a estar sobre la mesa, sobre todo porque una quincena de ministros eran candidatos.
Según las estimaciones, el partido de Marine Le Pen, finalista en las elecciones presidenciales de 2017, obtuvo un resultado inferior al que anticipaban algunos sondeos y al de las anteriores elecciones de 2015, en las que se impuso en seis regiones.