Los trabajos de conservación de la fachada principal de Palacio Nacional están por concluir; el objetivo es mantener en buen estado el monumento histórico, sede del Poder Ejecutivo, afectado recientemente por diversas causas.
La seguridad dentro del inmueble está a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional y afuera corresponde a las autoridades de la Ciudad de México.
Por tanto, el gobierno capitalino determina los mecanismos de protección en las inmediaciones de Palacio, cuyo perímetro actualmente está delineado por vallas metálicas.
Adriana Castillo Román, directora de Promoción Cultural y Acervo Patrimonial de la Secretaría de Hacienda (SHCP), responsable también de la Conservaduría de Palacio Nacional, informó que si bien los trabajos, iniciados el pasado 5 de abril, tienen una programación de cuatro meses, es posible que se concluyan antes.
Este nivel de restauración no se realizaba desde 2005, particularmente en la fachada, “sillar por sillar”, explicó.
Los recursos para estas labores provienen del Seguro de Bienes Patrimoniales contratado por la SHCP y son supervisadas por Conservaduría de Palacio y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los trabajos de estabilización y conservación del acabado pétreo de la fachada principal (200 metros lineales de cantera por cada lado), así como el mantenimiento de los portones (central, Mariano y dos laterales) tienen un avance en general de 80 por ciento.
El término depende no sólo de las condiciones climatológicas (hay materiales que no pueden colocarse frente a alta humedad ambiental), sino que también se atienden las eventuales correcciones que pudiera indicar la supervisión del INAH, dijo Castillo.
El trabajo especializado busca sacar incluso pintas añejas, lo mismo en las paredes que en las puertas.
No es una labor común; se requiere hacer limpieza fisicoquímica en la piedra, madera y elementos metálicos, al igual que en los sistemas de apertura.
También ajustar herrajes, aplicar “retardante de fuego”, preservador de madera y aplicar capa de protección a base de cera de abeja, resina Dammar y aceite de linaza.
Patrimonio histórico
Palacio Nacional, monumento histórico protegido por diversas leyes federales, es actualmente el edificio civil más importante de México y el más extenso de los mil 400 declarados inmuebles históricos en el Centro de la Ciudad de México.
Forma parte de un conjunto de edificios que comenzaron a erigirse, alrededor de la plaza, en el siglo XVI.
Además de ser la sede oficial del Poder Ejecutivo federal y oficinas de la administración pública, también es casa de museos y alberga obras de gran relevancia artística, como los murales de Diego Rivera.
La Plaza de la Constitución es además sitio de expresión de la inconformidad. En septiembre de 2019, por ejemplo, la Puerta Mariana, colocada en 1852 poco después de la invasión estadunidense, fue dañada a martillazos, fuego y pintas. Palacio Nacional es afectado igualmente por el paso del tiempo, el sol y la lluvia.