Bebidas no alcohólicas y energetizantes, ungüentos y cosméticos elaborados a partir de uno de los 100 componentes del cannabis ya se encuentran en el mercado mexicano. Fueron puestos a la venta por la empresa mexicana CBD Life, misma que espera que este 2021 se cuadripliquen sus ventas respecto del año previo.
La firma mexicana, que hoy en día vende sus productos en establecimientos como 7-Eleven, Farmacias del Ahorro o Chedrahui, comenzó operaciones en 2019. Ha levantado rondas de inversión por 20 millones de dólares y es la más grande a escala global en la venta de productos regularizados que contienen cannabidiol (CBD).
“Se forma en 2016, después de una extensa búsqueda en Estados Unidos y Canadá y Europa, está enfocada en vender productos de consumo y estamos diferenciados porque todos nuestros productos se hacen con CBD, que es el ingrediente terapéutico del cannabis y no con el THC, no tenemos que ver con las cuestiones lúdicas”, indica Iker Ruiz de Chávez, director general de la empresa.
Cuenta con la autorización de la Comisión Nacional Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) desde 2018, dado que el ingrediente que usa no causa alteraciones dentro del cuerpo humano.
“El CBD es uno de los más de 100 componentes químicos de la planta del cannabis, al igual que el THC (tetrahidrocannabinol, que es sicoactivo), pero lo que tiene el CBD no es un ingrediente adictivo o sicotrópico, al contrario, se le han encontrado diversas propiedades beneficiosas para la salud en diferentes rubros, desde ser neuroprotector hasta disminuir la ansiedad, el insomnio o el dolor y es utilizado en muchos productos y medicamentos porque tiene las propiedades farmacéuticas de la cannabis sin la parte sicoactiva”, explica Janko Ruiz de Chávez, cofundador de la empresa.
Detalla que el THC es el sicotrópico que más abunda en el cannabis, y además de tener propiedades sicoactivas tiene medicinales, pero “el CBD es la parte médica y no lleva ningún tipo de riesgo a la salud”.
Así, CBD Life hoy en día cuenta con una gama de cuatro cosméticos, entre los que destaca Mariguanol, que es una marca de la que tienen la licencia y tres bebidas, dos sin alcohol y una energetizante.
“Empezamos en 2019 y actualmente nos encontramos en más de 18 mil puntos de venta, lo que nos convierte en la empresa más grande del mundo en cuestiones de venta de productos con CBD. Somos parte de un grupo de empresas familiares de segunda generación formada hace más de 40 años, que es Grupo RCH; distribuimos medicamentos y materiales de curación desde hace 15 años”, agrega Iker Ruiz de Chávez.
Luego de que legisladores aprobaran el uso de productos de consumo y farmacéuticos con CBD en 2017 y de obtener sus licencias en 2018, la firma comenzó sus ventas un año después, en 2020 las duplicó y para el cierre de este año prevén cuadriplicarlas, además de que ya está en pláticas con cadenas comerciales como Oxxo para comercializar sus productos.
“La apuesta de CBD es un poco posicionar marcas en el espacio de derivados del cannabis, pero que van a públicos diferentes, el Mariguanol es para todas las casas de México; en las bebidas, las California son para la generación de 18 a 24 años, y la bebida energética es para las personas de 18 a 32”, precisa Janko Ruiz de Chávez.
Si bien, consideran que en el mercado mexicano aún existe cierta resistencia a la industria relacionada con el cannabis, estudios de mercado confirman que los consumidores tienen cada vez más interés por ver la planta en un producto en el mercado.
“Hay de todo, pero cuando diseñamos los productos hicimos estudios de mercado y resultó que la gente quiere ver la planta de la mariguana en los productos, si hay ideologías diferentes, pero la sociedad ya está mucho más abierta e incluso quiere ver la planta”, señala el director general.
Para dimensionar la importancia de la industria del cannabis, Iker Ruiz de Chavez detalla que sería una de las que aportaría 75 mil nuevos empleos, pues tiene presencia dentro de tres sectores.
“Está la del uso adulto, la medicinal y la del uso industrial, estos últimos provienen del cáñamo, cuando no tiene una concentración alta de THC es cáñamo, y se sacan de los usos industriales más de 50 mil aplicaciones, desde telas, biocombustibles, materiales de construcción. Se pueden hacer gran cantidad de aplicaciones de una manera más efectiva, entonces tiene una implicación en todo México, desde el campo, la industria y lo recreativo”, abunda el directivo.