En Internet comenzó a circular un activo virtual ligado con el peso mexicano. Se trata de MMXN, una stablecoin –variante de los criptoactivos– que tiene como fin ser un medio de pago adicional y servirá para poder hacer transacciones; sin embargo, no está respaldada por el Banco de México (BdeM).
El activo digital fue lanzado el jueves pasado por la plataforma MXO, que ofrece operaciones con distintas criptomonedas, entre ellas bitcóin y ether.
El MMXN no sirve como moneda de cambio ni sustituye al peso, por lo que sólo se puede utilizar para hacer transferencias entre los usuarios que cuentan con la plataforma de MXO, y que estén dispuestos a recibir tal activo.
Diego Montes, aliado blockchain de la firma especializada Legal Paradox, explica en entrevista con La Jornada de qué se trata esta moneda y advierte que no debe ser visto como un instrumento de inversión.
“El stablecoin, es un activo digital diseñado para imitar el valor de una moneda o de una divisa emitida por un banco central, es decir, el valor del dólar o el euro o en este nuevo caso el del peso”, indica.
Monedas como el bitcóin, son conocidas por tener valores elevados debido a que existen pocos “ejemplares” en la red, mientras las stablecoins tienen como uno de sus objetivos eliminar la volatilidad.
“Esta moneda lo que hace es eliminar la volatilidad y para lograr la paridad de su valor, lo que hacen sus desarrolladores es tener reservas en pesos mexicanos, es decir, si quiero emitir un millón de MMXN entonces debo tener un millón de pesos. Es de ahí de donde surge el respaldo de la moneda oficial”, apunta Montes.
Un respaldo que no es avalado por el Banco de México, como dijo el miércoles pasado el gobernador Alejandro Díaz de León, al señalar que el banco central no avala ninguna criptomoneda.
El MMXN funciona por medio de la tecnología blockchain o cadena de bloques, que se explica como una base de datos que no está controlada por ningún banco central.
“Todos los participantes del sector tienen acceso a los registros de las transacciones que se hacen. En el sistema financiero tradicional, el banco y el regulador son los que tienen el registro de la transacción solamente, quien envía y quien recibe, pero en esta cadena de bloques todos pueden tener acceso”, aclaró el especialista de Legal Paradox.
Agrega que el MMXN es un avance siempre y cuando se ponga en práctica de la forma correcta; entre sus ventajas es que hay estabilidad en el precio y que también puede servir para transferir dinero sin altos costos, es decir, apunta al mercado de remesas.
“Pero hay que dejar en claro que el BdeM desde hace un año ya había señalado que mantendría su distancia con los activos digitales, por lo que este activo no sustituye al peso mexicano”, precisó Montes.
El miércoles, Díaz de León dijo que “los criptoactivos están en su territorio, en su espacio, sentimos que debemos ser muy cuidadosos de esa sana distancia entre los dos para evitar confusiones de cara al consumidor”.