El presidente Andrés Manuel López Obrador hizo un reconocimiento público al empresario Carlos Slim Helú “por no jugar a las vencidas” ni querer someter al gobierno legal y legítimamente constituido, como lo intentan otros hombres de negocios.
“Yo quiero agradecerle mucho a los empresarios, entre otros empresarios importantes a Carlos Slim, que ha actuado de manera responsable, institucional, y está siempre en condiciones de llegar a acuerdos en todo, no juega a las vencidas, como otros, afortunadamente pocos, que quieren someter al gobierno, quedaron mal acostumbrados”, señaló.
En conferencia de prensa dijo que el empresario –presidente honorario del Grupo Carso– es respetuoso de la institucionalidad.
“Hay un cambio importantísimo y tiene que ver con el respeto a la autoridad legal y legítimamente constituida, porque nosotros estamos aquí por voluntad del pueblo, por la democracia”, expresó.
La mención al magnate –con quien ha trabajado en diversos proyectos desde hace varios lustros– se dio cuando señalaba la importancia de la conciliación “para enderezar entuertos” en diversos ámbitos y evitar llegar a litigios internacionales en los que regularmente pierden los gobiernos y, por tanto, se va dinero del pueblo, de la gente más humilde.
Indicó que le duele mucho esa situación, “un pecado social” en un país con tantos pobres.
Luego, al hablar de posibilidades de solución en conflictos del orden laboral, ratificó el compromiso de respetar la ley, particularmente en el marco del acuerdo comercial de América del Norte, y seguir buscando un mejor salario para los trabajadores mexicanos.
Ahí destacó la importancia de las organizaciones gremiales en Estados Unidos, Canadá e Inglaterra y la manera en que dieron su apoyo al líder del sindicato minero, Napoleón Gómez Urrutia.
Contó que cuando fue a Londres, invitado por el dirigente del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, se entrevistó con la central obrera del Reino Unido, la cual es “mucho muy fuerte... Y ellos me pidieron que tomáramos en consideración lo que estaba sucediendo con los dirigentes mineros, lo que tenía, vamos a decir en el exilio, a Napoleón Gómez Urrutia, porque es una organización internacional en la que se ayudan, se protegen mutuamente.
“Entonces –prosiguió– ahí hicimos el compromiso de revisar el caso y que no hubiese persecución política para ningún dirigente en México, y lo cumplimos y lo vamos a seguir cumpliendo.”
Los temas de la mañanera de ayer fueron variados, desde advertir que continuará enfrentando las “resistencias al cambio” de constructoras que dañan el medio ambiente –“a ver quién se cansa primero”, retó– hasta atender toda clase de gestiones y “sueños”, como el del enviado de un canal de YouTube para que en los terrenos de Texcoco, donde en el sexenio pasado se pretendía fincar un aeropuerto, sea reconstruida “con nuestras propias manos” la Gran Tenochtitlan, a modo de parque de diversiones tipo Disneylandia, dijo.
El Presidente respondió que se están recuperando lagos y se crearán áreas de recreación, de deporte, en la zona, pero “no se descarta lo que tú estás planteando”.