Hong Kong. El diario prodemocracia de Hong Kong, Apple Daily, publicó este viernes una edición especial un día después de que la policía allanara su redacción, con un tiraje grande y un mensaje desafiante en su portada que dice: "Debemos seguir adelante".
El desafío se produce cuando la policía acusó formalmente a dos de los ejecutivos del periódico en virtud de la nueva ley de seguridad nacional, que reprime la disidencia en el territorio chino.
El personal volvió a una redacción en la que ya no estaban muchas computadoras y discos duros, que fueron requisados por la policía. Los periodistas trabajaron toda la noche para producir la edición del viernes, como ha ocurrido los últimos 26 años.
Esta vez se vieron rodeados por reporteros de medios rivales que documentaron lo que parecía ser un declive de la libertad de prensa en su ciudad, un centro de medios internacionales.
Los editores optaron por una portada sencilla con las fotos de los cinco directivos arrestados y un título detallando la operación policial.
Debajo del título, en letras amarillas, escribieron "Debemos seguir adelante", las palabras que Cheung expresó al personal cuando la policía lo llevó esposado.
El diario hizo una edición extraordinaria de 500 mil ejemplares, lejos de su circulación usual de 80 mil copias, en espera de que los hongkoneses estuvieran deseosos de enterarse de lo ocurrido.
El diario y su encarcelado propietario, el multimillonario Jimmy Lai, han sido una espina en el costado de Pekín por su apoyo abierto al movimiento prodemocracia y sus duras críticas a los dirigentes autoritarios chinos.
Pero esos mismos dirigentes ahora están decididos a silenciar la publicación.
Más de 500 policías allanaron el jueves la redacción del diario, en una operación que las autoridades atribuyeron a artículos que supuestamente pedían sanciones contra China.
Es la primera vez que las opiniones y los puntos de vista políticos publicados en los medios de Hong Kong ponen en marcha la ley de seguridad nacional.
Cinco directivos, incluido el jefe de redacción Ryan Law y el presidente Cheung Kim-hung, fueron detenidos bajo la nueva ley acusados de colusión con fuerzas extranjeras para socavar la seguridad nacional de China.
Ryan Law y Cheung Kim-hung fueron inculpados este viernes. Los otros tres ejecutivos quedaron en libertad bajo fianza, informó el diario South China Morning Post.