Miles de griegos participaron en manifestaciones y huelgas por segunda ocasión en una semana, en rechazo a una ley laboral que aprobó ayer el Parlamento. Los transportes públicos de Atenas, las conexiones marítimas con las islas griegas, así como numerosos servicios públicos, suspendieron operaciones. La reforma, impulsada por el premier Kyriakos Mitsotakis, flexibiliza la jornada laboral y limita el derecho a huelga. Foto Ap