A sus nueve y 13 años, los hermanos Isaac y Nora han encontrado en la música un lenguaje universal. Sus orígenes diversos como hijos de una madre francesa y un padre surcoreano, además de su predilección por las canciones latinoamericanas, son muestra de cómo los jóvenes han condensado todo dentro de una labor que apenas comienza a germinar.
Isaac y Nora nacieron en Quimper, un pequeño pueblo junto al mar, en la Bretaña francesa. “Siempre hemos vivido aquí, así que aquí es donde nos sentimos más como en casa”, explicaron en entrevista con La Jornada.
En casa, donde había varios instrumentos musicales, Nicolas, su padre, les enseñó a tocar. “Isaac empezó con la trompeta cuando tenía siete años. Nora tenía sólo cuatro, pero insistió en participar en nuestras sesiones de música, cantando. Así nació el grupo, cuando interpretábamos los tres canciones con un arreglo para voz, trompeta y guitarra”, contó.
Veinte años, famosa en YouTube
Lo de la música latinoamericana surgió como resultado de un proyecto que los hermanos y su padre tenían: el Latin and Love Studies, disco hecho de temas populares que habían planeado incluso antes de que su versión de Veinte años, de la cantautora cubana María Teresa Vera, se volviera viral en YouTube.
“Entonces escuchamos mucha música latina para elegir las canciones que nos gustaban y que nos sentíamos capaces de interpretar”, indicaron Isaac y Nora. “Para nosotros es muy exótico y nos hace viajar un poco con sólo escuchar. No crecimos escuchando esa música, y estamos descubriendo su enorme repertorio e intentamos aprender algo de él”.
Aunque admiten que la buena música existe en todo el mundo, Isaac y Nora han encontrado en las melodías latinoamericanas un “ambiente cálido” que han aprendido a disfrutar. “La música latina nos toca de forma particular. Para nosotros, realmente está asociada a la diversión, al baile, a la fiesta…”
Las interpretaciones de los hermanos son sencillas, pero contundentes, para plasmar su estilo a temas muy conocidos en América Latina, “Isaac intenta tocar con su trompeta las partes instrumentales ornamentales, por ejemplo, las de requinto en un trío. Nora canta con su voz y su acento”, explicó su padre. Él, por su parte, agrega sencillos arreglos de guitarra con los que sus versiones terminan de cobrar forma.
Pese a su juventud, los hermanos parecen decididos a que la música permanezca por mucho tiempo en sus vidas. Como complemento a su labor, a Nora le gustaría aprender a tocar el saxofón, o el clarinete; mientras su hermano quisiera estudiar la zanfoña, “un instrumento extraño; me gusta el sonido que tiene”.
Además de su preparación, Isaac, todavía indeciso sobre su futuro, desea que la música permanezca como una parte de su vida. Mientras Nora quiere seguir cantando y ser diseñadora cuando sea adulta.
La pandemia ha impedido que la familia salga a dar conciertos, una de las partes de la música que más agrada a los hermanos. “Nos gusta mucho hacerlos, uno de nuestros favoritos fue el que dimos en nuestra escuela, porque estaban todos nuestros amigos y los profesores”, relataron Isaac y Nora, quienes empezaron a presentarse desde que aprendieron a tocar sus primeras canciones.
También durante el confinamiento, Nora, quien cursa la primaria, e Isaac, quien asiste a la secundaria, han tenido tiempo para darse cuenta de que echan de menos ir la escuela.
Actualmente los hermanos buscan mejorar sus interpretaciones; “ya trabajamos en nuestro próximo disco, que será un álbum de canciones originales. Es muy interesante participar en la creación de una obra aunque no seamos los autores: elegir una clave, un tempo, un arreglo, una estructura sin tener ninguna referencia”, detalló el padre de Isaac y Nora.
El primer álbum de Isaac y Nora, Latin and Love Studies ya se puede escuchar en plataformas de streaming.