La actividad de la construcción no logra remontar su crisis –que se agravó con la pandemia de Covid-19– y sigue en desaceleración. El crédito que las empresas del sector solicitan a los bancos acumula un año a la baja, confirman cifras del Banco de México (BdeM).
Especialistas del sector consultados por La Jornada, aseguran que el declive en esta actividad, que al cierre de 2020 aportó 6.7 por ciento al producto interno bruto (PIB), es reflejo de los bajos niveles de inversión en infraestructura en el país y al lento proceso de vacunación contra el Covid-19. Será hasta finales de año cuando regrese a los niveles observados el año pasado, pero no a los anteriores a la emergencia sanitaria.
De acuerdo con información del Banco de México (BdeM), hasta el cuarto mes del año, el saldo de la cartera de crédito bancario a este segmento fue de 456 mil 967 millones de pesos, una disminución de 7.06 por ciento respecto de igual mes de 2020.
En abril del año pasado, justo al inicio de las restricciones a la movilidad y a las actividades económicas por la pandemia, el portafolio había llegado a un máximo de 491 mil 700 millones de pesos.
Desde ese mes hasta diciembre de 2020 fue a la baja, para después repuntar entre enero y febrero, y ahora son dos meses seguidos en declive.
En tanto, el saldo vencido en los créditos otorgados al sector de la construcción, según la información proporcionada por el banco central, llega a 7 mil 98 millones de pesos, 34.8 por ciento más alta respecto de los 5 mil 262 millones reportados en abril, pero del año previo.
Samuel Velázquez, economista principal de BBVA México, comentó que la desaceleración del sector no se presenta a raíz de la pandemia, sino desde antes, y la crisis agudizó el fenómeno.
“En el primer trimestre del año, hubo una caída de 14 por ciento del valor bruto de la construcción respecto de 2020, pero si vamos a 2019 la baja es superior. Esto se debe a varias razones: la reducción en la inversión, la caída en la demanda de la vivienda desde 2016 y que a la infraestructura se le han dedicado pocos recursos públicos y viene a la baja desde 2014”, precisó.
Alejandra Vargas, analista bursátil de Ve por Más (BX+), explicó que otro fenómeno que actualmente incide en el sector es el lento proceso de vacunación en contra del Covid-19.
“El proceso de vacunación se relaciona debido a que más personas pueden regresar a las actividades, y a que esto le da mayor certidumbre a los inversionistas”, puntualizó la experta.
Para entender la importancia de la construcción dentro de la economía, más allá de su aporte al PIB, precisó Velázquez de BBVA, el sector es uno de los mayores empleadores del país y contribuye a elevar el potencial de crecimiento económico.
“Una recuperación del sector se vislumbra hasta finales de 2021 y principios del siguiente año, justamente por los planes de vacunación, porque vemos que en los países donde el plan avanza bien es dónde mejor le va a la industria”, refirió Vargas de BX+.
A su vez, el especialista de BBVA consideró que conforme las exportaciones y el ritmo industrial mejore, habrá una reactivación más acelerada del sector.
“En general la economía sectorial repuntará, sobre todo por la parte foránea, vía la industria externa y sobre todo la exportación. Cuando en Estados Unidos mejoren la economía y la industria, mejorará la economía en México, y esto incide en la construcción en la parte de la creación de nuevas naves industriales, y eso se da en la parte de exportaciones”, agregó Velázquez.