Bogotá. El Comité Nacional de Paro en Colombia, el frente más visible de las protestas que estallaron el 28 de abril contra el presidente Iván Duque, le dio un respiro al gobierno al anunciar este martes la suspensión de las movilizaciones hasta el 20 de julio.
"Vamos a hacer una interrupción temporal de las movilizaciones recurrentes que hemos venido haciendo los miércoles en todo el país", dijo Francisco Maltés, uno de los voceros de la organización que no representa a todos los sectores inconformes, en conferencia de prensa.
Para el 20 de julio, el Comité convocó a un concierto y una "gran movilización" en el Congreso "para entregar proyectos de ley", informó Maltés, también presidente de la Central Unitaria de Trabajadores.
Los proyectos de ley en el país pueden ser presentados por miembros del Congreso o respaldados por firmas.
Sindicatos, estudiantes, indígenas y organizaciones sociales integran el Comité, surgido en 2019, que dio origen al inédito movimiento de protestas contra Duque que mantiene la presión en las calles, con algunos intervalos.
La organización había suspendido este mes las conversaciones que mantenía desde principios de mayo con el gobierno, sin alcanzar ningún acuerdo para desactivar la crisis.
En pleno auge de contagios y muertes por Covid-19, manifestantes se toman a diario las calles para exigirle al presidente un cambio de rumbo a sus políticas, el cese de la represión policial y un Estado más solidario ante los estragos causados por la pandemia, que hundió en la pobreza a 42% de la población de 50 millones de habitantes.
Al menos 61 personas han muerto desde que iniciaron las protestas, según autoridades y la Defensoría del Pueblo (ombudsman), que vela por los derechos humanos. Dos de los fallecidos eran uniformados.
Duque desató la ira popular cuando quiso subir impuestos para, según el gobierno, financiar las ayudas a los más afectados por la pandemia. El mandatario desistió de su idea, pero la represión avivó todavía más el descontento.
De acuerdo al Ministerio de Defensa, cerca de 2 mil 500 personas, entre civiles y miembros de la fuerza pública, han sufrido lesiones durante las movilizaciones.
"Cambio de táctica"
Las protestas son en su mayoría festivas y pacíficas en el día, pero en las noches suelen volverse sangrientas, con fuertes choques entre civiles y policías.
La ONU, Estados Unidos, la Unión Europea y oenegés internacionales han denunciado graves excesos cometidos por la fuerza pública.
Según Human Rights Watch existen "denuncias creíbles" sobre 68 muertes en el marco de las protestas, de las cuales 20 ocurrieron al parecer a manos de policías, y entre ellas 16 fueron por balas disparadas con intención de "matar".
El Comité le exigía a Duque una condena explícita a la brutalidad policial y disculparse por los excesos de la fuerza pública para sentarse a negociar.
De su lado, el gobierno pedía el fin de los bloqueos viales como condición para avanzar en las conversaciones. Los cortes de ruta se han ido disolviendo, aunque este martes persistían 15.
La organización alegó falta de "voluntad política" por parte del gobierno y presentó el anuncio como "un cambio en la táctica" para continuar su "lucha en otros escenarios como es el arte, los conciertos".
Sin dar detalles sobre los proyectos de ley que serán presentados al Congreso el 20 de julio, Día de la Independencia de Colombia, el comité aseguró que durante este mes recogerán los reclamos de la "comunidad".
En el poder desde 2018, el mandatario enfrenta la ira popular a un año de las elecciones de las que deberá salir su sucesor. Un eventual acuerdo con el Comité Nacional del Paro es visto como un paso hacia el fin de la crisis, aunque no una solución definitiva.
El gobierno le pedía a los voceros de los manifestantes parar las movilizaciones, cuando el país bate récords diarios de muertes por covid-19 y sus hospitales están bajo máxima presión.