Los enormes atlantes y pilastras con relieves de la ciudad prehispánica de Tula, que evocan a guerreros toltecas en el estado de Hidalgo, quedaron impresos en el más reciente boleto de la Lotería Nacional, del sorteo mayor 2687, como testimonio del pasado histórico y una invitación para conocer el patrimonio prehispánico.

La urbe del imperio Tolteca fue un refugio de los últimos teotihuacanos. El importante foco civilizatorio, fechado entre los siglos VIII y XII después de Cristo, llegó al final de su hegemonía debido a la incursión de grupos de filiación mexica y a las disputas internas. También, se especula de donde fue expulsado Quetzalcóatl, quien fue derrotado por Tezcatlipoca.

De enorme importancia comercial y militar, la influencia del sitio prehispánico se extendió desde la zona del Bajío hasta El Salvador y Nicaragua. “Se trata, sin duda, de una historia fascinante”, expuso ayer Héctor Álvarez, director en Hidalgo del centro delegacional del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el histórico edificio El Moro, sobre Paseo de la Reforma, donde los niños gritones darán a conocer la noche del viernes los números ganadores.

Informó que antes de la pandemia Tula recibía el 75 por ciento de los visitantes a las zonas arqueo-lógicas de Hidalgo, y se ubicaba en el lugar 12 de las más visitadas en el país, con más de 220 mil visitantes al año. Sin embargo, como en el resto de México, el forzoso cierre provocó una fuerte caída en la visita pública, la cual llegó a solo 48 mil personas en 2020. Anunció que el sitio reabrirá “en cuanto el semáforo epidemiológico baje a un color más suave”.

El arqueólogo, quien acudió en representación de Diego Prieto, titular del INAH, detalló que desde hace 6 meses se hace un recorrido por medio de imágenes de los sitios arqueológicos más representativos y determinantes de nuestra cultura para dar a conocer su grandeza e incentivar el interés por visitarlos.

La zona de Tula, en el estado de Hidalgo, es la estampa 19 de una iniciativa que contempla 32 lugares, impulsada por el INAH, en colaboración con la Lotería Nacional, la Coordinación de Memoria Histórica, Cultural de México y la asociación de secretarios de Turismo de México.

Margarita Saravia González, directora de Lotenal, señaló que la imagen representativa de la zona arqueológica de Tula, Hidalgo, forma parte de la labor para la promoción de la cultura y la historia como eje sustantivo del quehacer de la institución que ha acompañado al país por 251 años, pues su primer sorteo fue en 1771. El próximo viernes se repartirán 51 millones de pesos, con un premio mayor de 17 millones.

En la ceremonia de develación del billete en el edificio de avenida Reforma también participaron Omar Fayad, gobernador de Hidalgo; Eduardo Villegas, coordinador de Memoria Histórica y Cultural de México y Eduardo Baños, en representación de la Asociación de Secretarios de Turismo.