Roma. Italia abrió la Eurocopa de la mejor manera, con una victoria 3-0 sobre Turquía en el primer partido del torneo disputado en el Estadio Olímpico de Roma, donde el combinado de Roberto Mancini presentó su condición de favorita al cetro con un año de retraso por la pandemia del coronavirus.
La Azzurra, gran ausente del Mundial de Rusia 2018, festejó a la perfección su regreso a una competición internacional cinco años después de la Eurocopa 2016 y se colocó de líder en el grupo A, que completan Suiza y Gales, que se enfrentan este sábado.
Con su clara y sólida victoria, el plantel de Mancini sigue confirmando su estatus como una de las favoritas al título el 11 de julio en Wembley. Por el momento elevó su cuenta de partidos sin perder con una racha de 28 encuentros.
Italia, que consiguió un pleno de 10 victorias en su grupo de clasificación para esta Eurocopa, no ha recibido goles en sus últimos nueve duelos, en los que ha firmado 28 tantos.
Turquía, mejor defensa –igualada con Bélgica– de la fase de clasificación del torneo con apenas tres tantos recibidos, se apoyó en su solidez atrás para tratar de dar la sorpresa, pero su estrategia sólo sirvió los primeros 45 minutos. Después del descanso, Italia aceleró y pasó por encima de los otomanos.
Justo antes del descanso, Italia reclamó en vano un penal por una mano de Zeki Celik, pero el árbitro revisó las imágenes en el VAR y consideró que no debía pitar pena máxima, para enfado de los tifosi y jugadores locales.
Un tanto en contra de Merih Demiral en el minuto 53 fue el primero del torneo, cuando Domenico Berardi dio un pase en dirección hacia Ciro Immobile, pero el balón rebotó antes en el torso del defensa turco, engañando a su propio guardameta, Ugurkan Cakir.
Poco después, Immobile (66) firmó el segundo del plantel italiano al aprovechar un rechace de Cakir tras un disparo de Leonardo Spinazzola.
La sentencia definitiva la marcó Lorenzo Insigne al minuto 79, con un disparo cruzado tras recibir una asistencia de oro de Immobile desde la frontal del área.
Berardi, implicado en las jugadas de los tres tantos de su equipo, fue la figura en la sombra de la Nazionale, después de haber superado a Federico Chiesa como extremo derecho para ser titular. Incluso en la primera parte estuvo cerca de brindar tantos a Insigne (18) e Immobile (33), que no anotaron entonces por poco.
Las tres dianas de la segunda mitad hicieron que Italia se olvidara de la polémica del primer tiempo, frente a una Turquía que llevó peligro a los dominios de Gianluigi Donnarumma, especialmente con un centro peligroso de Burak Yilmaz (36) y luego con un contragolpe de Cengiz Ünder (51).
“Hicimos un gran partido, aunque no fue fácil marcar. Era el primer duelo y Turquía tiene un muy buen equipo. El público nos ayudó mucho, estamos muy contentos y creo que hemos jugado bien”, indicó Mancini tras la cómoda victoria.
El partido entre italianos y turcos tuvo a unos 16 mil espectadores en la grada del Estadio Olímpico, un cuarto del aforo total del recinto debido a las restricciones anticovid.
Antes del partido de apertura tuvo lugar una breve ceremonia para levantar el telón de la competición. Allí los ex futbolistas Francesco Totti y Alessandro Nesta llevaron simbólicamente el balón del torneo, bautizado como “Uniphoria” (unidad y euforia). El tenor Andrea Bocelli interpretó Nessun Dorma, de la ópera Turandot de Puccini, delante de grandes globos que representaban a los 24 países participantes.
Ante la preocupación de que un brote de coronavirus pueda mermar sus posibilidades de conquistar la Eurocopa, España envió el viernes a personal del ejército a vacunar a su selección. En tanto, Dinamarca, de vuelta al torneo tras perdérselo hace cinco años, enfrentará hoy a Finlandia en jornada del Grupo B.