Es complicado que cambien las condiciones que generaron la matanza de El Charco, municipio de Ayutla de los Libres, debido a que el régimen político y sus estructuras se mantienen vigentes, coincidieron participantes en el encuentro virtual efectuado con motivo del 23 aniversario de la masacre de El Charco, cometida a manos del Ejército mexicano contra 10 indígenas na savi y un estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México.
En el evento, organizado por la Red Solidaria Década contra la Impunidad, participó Efrén Cortés Chávez, sobreviviente, quien enfatizó que la represión del gobierno ocurrida el 7 de junio de 1998, fue producto de una violencia sistemática ejercida, en este caso, contra una población que lo único que hizo fue organizarse para defender el territorio y su derecho a la autonomía.
Manifestó que “buscar justicia en México es muy difícil, y más cuando lo ocurrido es responsabilidad del Ejército mexicano”.
La estructura sigue ahí
Sin embargo, señaló que el rescate de la memoria es fundamental, pues la herida sigue ahí, así como el recuerdo y el dolor por la muerte de hombres emblemáticos. Explicó que en esta ocasión no se efectuó un evento conmemorativo presencial por las restricciones a las que obliga la pandemia de Covid-19.
Respecto a la falta de justicia sobre el caso después de más de dos décadas, recalcó que “no es que el presidente Andrés Manuel López Obrador sea una mala persona, es la estructura la que sigue ahí”, debido a ello, Cortés Chávez refirió que los pueblos originarios deben mantenerse en la lucha, no sólo por su reconocimiento, sino por el respeto a sus formas y costumbres.
El obispo veterocatólico Óscar Pérez Solano reiteró que, a pesar de que ha pasado casi un cuarto de siglo, “este caso causa todavía dolor, conmoción y mantiene vivo el espíritu de lucha de enfrentar a la adversidad, la desgracia y a la mano opresora, misma que ha lastimado a una sociedad, por lo que se tienen que seguir buscando esos caminos de aplicación de las leyes que nos dé certeza de que realmente el Poder Judicial en México sí funciona”.
Por su parte, fray Julián Cruz Alta, advirtió que no ha habido celeridad en la investigación del caso ni para castigar a los responsables de lo ocurrido en El Charco, por lo que exigió que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que presente el informe de fondo, para exigir al Estado mexicano que rinda cuentas y se sancione a los culpables.