Observadores electorales internacionales aseguraron que el balance de la jornada electoral celebrada ayer en el país resultó “positivo”, aun cuando se reportaron a algunos “incidentes menores”.
Llamaron la atención en torno a la violencia, en particular los asesinatos de candidatos en distintos puntos del territorio mexicano, ya que puedieron inhibir el voto.
Manifestaron su preocupación por las fricciones entre el gobierno federal y las autoridades electorales.
Como se ha vuelto habitual durante los comicios, diversas misiones de observación externa, procedentes de varias naciones y organismos, tuvieron presencia en el país para verificar el proceso.
Anna Ravel y Armand Peschard, del Delian Project (conformado por expertos de Estados Unidos y Canadá), resaltaron la organización de las elecciones gracias a la labor del Instituto Nacional Electoral (INE), incluidas las medidas de prevención para evitar la propagación del Covid-19.
“Nos preocupa la violencia enfocada en las y los candidatos, primordialmente a nivel municipal, no es una violencia dirigida contra el electorado, pero durante este proceso vimos una tendencia al alza y es preocupante porque vulnera el espíritu de la ciudadanía para elegir a quienes deseen”, señaló Peschard.
Ravel, quien fue comisionada demócrata ante la Comisión Federal de Elecciones de Estados Unidos, planteó que la violencia representó un gran problema en el contexto electoral de 2021 en México y alertó que ésta es un riesgo para el sistema democrático nacional.
Asimismo, ambos destacaron la relevancia de mantener un INE independiente y autónomo.
Román Jáquez, jefe de misión de la Unión Interamericana de Organismos Electorales, que agrupa a expertos de Latinoamérica, indicó que lograron verificar un proceso “sin incidentes y cívico”.
Sobre la violencia contra candidatos, el especialista, quien es presidente de la Junta Central Electoral de República Dominicana, refirió que ésta “no debe atribuirse totalmente a cuestiones partidarias, pues también está vinculada a la delincuencia organizada y al narcotráfico, con lo que empañan la imagen de las elecciones, que son la espina dorsal de la democracia”.
Llamó a los candidatos y partidos que no estén conformes con los resultados a no estigmatizar ni rechazar el proceso, sino a seguir las vías legales para interponer recursos e impugnaciones.
Santiago Cantón, jefe de la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos, aseveró que se debe poner punto final a la violencia política, pues “corroe los cimientos de la democracia”.
Indicó que los observadores de la OEA “no han notado incidentes de gravedad que puedan alterar de manera significativa esta elección”.
Las misiones de observadores internacionales entregarán informes a las autoridades electorales donde delinearán lo que verificaron durante el proceso.