Las instituciones de tecnología financiera (fintech) que se enfocan en la apertura de cuentas para hacer operaciones, pagar servicios o realizar inversiones, toman cada vez más relevancia en México, pues son fáciles y rápidas de usar, aseguran especialistas del sector.
Según la firma Legal Paradox, en el país al menos 2 millones 200 mil personas tienen una cuenta de inversiones en instituciones de ese tipo. Incluso, se estima que dos de cada 10 cuentas nuevas se abren por este medio. Se trata de instituciones financieras que a nivel mundial son conocidas cono neobancos. A diferencia de las instituciones bancarias tradicionales, éstas no cuentan con sucursales, todo se realiza por medio del teléfono celular y operan todos los días del año las 24 horas del día.
En su definición más explícita, los neobancos son fintech que ponen en marcha servicios similares a los bancarios, como cuentas de ahorro, billeteras electrónicas, pago de servicios e instrumentos de inversión.
En México, según la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), el término “banco” sólo puede ser utilizado cuando una institución esté autorizada para operar como tal; sin embargo, en el país ya hay varias que a nivel global son catalogadas como neobancos.
“En México ya se ofrecen los servicios de un neobanco, el primero de ellos son las wallets, es decir, plataformas por las que se pueden hacer movimientos o pagos digitales”, refirió Carlos Valderrama, socio consultor de Legal Paradox.
Por otra parte están las que ofrecen préstamos o tarjetas de crédito sólo por aplicaciones digitales, y la tercera es la de los fondos de inversión, firmas que en México se les conoce como de “fondeo colectivo”.
En un principio, las más conocidas, con presencia en México, son Nu, propiedad de la brasileña Nubank, que ofrece tarjetas de crédito; Ualá, de Argentina, cuentas de depósito y pago de servicios; Rappi Pay, de origen colombiano que funciona con la aplicación del mismo nombre y ofrece ambas cuentas.
Otros ejemplos de neobancos que operan en México son Albo, Doopla, Broxel, Bnext o Flink, esta última permite realizar inversiones en empresas como Netflix o Apple, y también ofrece cuentas de depósito.