Bogotá. Al menos dos civiles murieron y varias personas resultaron heridas, entre ellas cuatro policías, durante un enfrentamiento ocurrido la noche del viernes al sábado entre miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), apoyados por el ejército, y manifestantes en la sureña ciudad de Cali, punto del estallido social iniciado el 28 de abril en Colombia, que ha dejado decenas de muertos.
Según autoridades, el choque ocurrió cuando en el sector Paso del Comercio un grupo de policías fue atacado con armas de fuego por personas que pretendían bloquear uno de los accesos de la capital del departamento del Valle del Cauca.
Habitantes de la zona reportaron gritos de auxilio, insultos, detonaciones de bombas aturdidoras y gas lacrimógeno y una “lluvia de balas” durante los choques, informó el diario El Tiempo. Videos y fotos publicados en redes sociales muestran a manifestantes agachados mientras se escuchan ráfagas de disparos.
El comandante de la Policía Metropolitana de Cali, general Juan Carlos León, confirmó el deceso de dos civiles y al menos tres heridos; además, apuntó que cuatro uniformados también resultaron lesionados, uno de ellos por impacto de bala en una pierna. En contraparte, una misión médica corroboró la defunción de dos jóvenes y notificó que al menos 28 personas resultaron lesionadas con armas de fuego y objetos contundentes. Ambos reportes se emitieron cuando las autoridades salud corroboran el total de afectados.
El ministro de Defensa, Diego Molano, rechazó “la violencia que dejó cuatro policías heridos” y divulgó un video que muestra a varios civiles disparando desde las barricadas contra los uniformados.
Esta es la segunda noche consecutiva de violencia, después de que el jueves la policía y el ejército lanzaron una operación para retirar los bloqueos en la zona. Los agentes lograron retirar la barricada la mañana del viernes, pero durante el día llegaron al lugar más manifestantes para volver a cerrar la vía y a enfrentarse contra las fuerzas públicas.
“La policía está evitando que se vuelva a tomar la vía, que pongan barricadas”, expresó León, y agregó que el paso se encuentra “totalmente desbloqueado”. Según el Ministerio de Defensa, persistían hasta ayer 45 bloqueos activos en las vías del país.
El gobierno exige el levantamiento total de los bloqueos para avanzar en la mesa de diálogos con el Comité del Paro Nacional (CPN), al denunciar el desabasto de alimentos, medicinas y combustibles en diversas regiones. El comité –que reúne a sindicalistas, indígenas, campesinos, pensionados, estudiantes y profesores– señala que no son bloqueos, sino puntos de resistencia legales en las movilizaciones, y asegura que se han levantado decenas de retenes como muestra de voluntad para la instalación de negociaciones.
El consejero presidencial Emilio Archila, coordinador en los diálogos con el CPN, negó que haya “actitud dilatoria” del gobierno por no firmar el documento preliminar pactado el 24 de mayo, que incluye garantías para ejercer la protesta social.
“Eso simplemente no tiene ni pies ni cabeza. El del 24 nunca se pensó que fuera un documento que se fuera a firmar”, afirmó Archila, citado por El Tiempo. Señaló que de “manera sorpresiva” los miembros del comité cambiaron de posición y exigen firmar un borrador, que, además, “tendría una falencia gigantesca y es que ahí no había todavía ningún texto sobre condena de los bloqueos”.
El CPN informó que mostrará este y otros documentos a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos durante su visita a Colombia para dar garantías a la protesta social. “Como no lo firmamos, van a pretender decir que hay actitud dilatoria del gobierno”, criticó el funcionario.
La firma del documento y exigencias como la derogación del decreto de asistencia militar a la policía en el contexto del paro, entre otros puntos, son los principales obstáculos de las conversaciones, iniciadas desde el 7 de mayo. Aunque no reúne a todos los sectores que rechazan las políticas del presidente Iván Duque, un eventual acuerdo con el CNP es visto como paso importante para la desactivación de la crisis nacional.
La ONG Temblores tiene registro desde que comenzó el paro de mil 248 víctimas de violencia física, 45 homicidios presuntamente cometidos por la fuerza pública, mil 649 detenciones arbitrarias, 705 intervenciones de fuerzas del orden en las protestas, 65 víctimas de daño ocular y 22 víctimas de violencia sexual.