Conforme se reactiva la actividad económica del país, las empresas y los gobiernos deberán realizar “un doble esfuerzo” para reincorporar a las mujeres en el campo laboral, debido a que la pandemia de Covid-19 impactó de manera desproporcionada en el empleo, señalaron especialistas en la materia.
Arleth Leal, experta en recursos humanos, detalló que de las 1.6 millones de personas que dejaron de formar parte de la población económicamente activa (PEA), 84 por ciento eran mujeres. Además, de las 2.1 millones de personas que ya no están ocupadas, siete de cada 10 eran también mujeres.
La especialista hizo notar que el empleo femenino se vio principalmente perjudicado debido a que los puestos que ocupaban estaban en la primera línea de las industrias que se vieron afectadas por la emergencia sanitaria, que tuvieron un efecto negativo en el sector turístico y las áreas comerciales.
“Pero también las mujeres estaban renunciando a sus puestos de trabajo de forma voluntaria, porque no había quién se quedara al cuidado de los hijos y entonces asumieron esa responsabilidad, además de que dejaron de hacerlo por el temor de salir y contagiar a su familia”, explicó.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), en el primer trimestre de 2021, 1.6 millones de personas salieron del mercado laboral y no han retornado. Esto significó que la PEA pasó de 57 millones a 55.4 millones, lo que representa una reducción de la fuerza laboral.
La Organización Internacional del Trabajo destacó en su más reciente informe, que el sector femenino sufrió un fuerte golpe por la pandemia, al registrar una reducción del empleo de 5 por ciento frente a 3.9 por ciento entre los hombres. De igual forma, 90 por ciento de las que perdieron su empleo en 2020 no sólo se quedaron sin trabajo, sino que salieron de la población económicamente activa.
Leal refirió que, de acuerdo con diversas encuestas, ocho de cada 10 mujeres no han podido regresar a laborar porque aún “tienen que atender otras ocupaciones o enfrentan una situación familiar difícil”.
Por ello, recomendó que se impulsen políticas públicas por parte del gobierno. Respecto a las compañías, éstas deben de contratar a las mujeres bajo la modalidad de trabajo en casa, en sectores que propicien su reinserción como la administración, la contabilidad y las tecnologías.
Sobre el tema, Armando Leñero, presidente del Centro de Estudios de Empleo Formal (CEEF), coincidió en que los empresarios “deben de voltear a ver al mercado de las mujeres, porque ellas tienen mucho potencial, incluso más que los hombres, y son más eficaces en el manejo administrativo, en el ámbito financiero y contable, donde “tienen mucha agudeza”.