Ciudad de México. Los riesgos para el peso mexicano se encuentran en lo que ocurre en las economías mundiales, principalmente en Estados Unidos, más que en la situación política interna, como las elecciones intermedias de este fin de semana, consideraron analistas económicos.
Este domingo 6 de junio se realizarán votaciones para renovar la Cámara de Diputados y 30 de los 32 congresos locales; además de que están en juego 15 gubernaturas. Sin embargo, los comicios parecen estar pasando inadvertidos para los mercados financieros nacionales.
“El comportamiento del tipo de cambio en México obedece más a choques externos que a internos. Ocho de cada 10 pesos del comercio están vinculados con Estados Unidos, lo que es uno factor que está impidiendo que los activos financieros sufran con el nerviosismo propio de este tipo de eventos electorales.
“Si bien es cierto que hay una irracionalidad muchas veces en los movimientos de los mercados cambiarios y accionarios, el vínculo con los mercados de Estados Unidos nos están haciendo justicia”, sostuvo Luis Fernando Muñoz, profesor investigador de tiempo completo del departamento de producción económica de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Unidad Xochimilco.
El mercado cambiario en México ha cotizado en promedio sobre los 20.1914 pesos por dólar durante el año. Este viernes, el tipo de cambio interbancario se negoció en 19.94 pesos por dólar, nivel similar al 19.98 registrado al inicio del año, de acuerdo con el Banco de México. Mientras, el mercado accionario acumula una ganancia nominal en 2021 de 14.56 por ciento.
De acuerdo con Carlos Quiroga, analista senior de Masari Casa de Bolsa, la volatilidad (si el precio de un activo cambia mucho en el tiempo) en el tipo de cambio se da más durante las elecciones presidenciales.
“Si bien las elecciones intermedias son importantes por ser las más grandes del país. La ‘tranquilidad’ de las cotizaciones del tipo de cambio de las últimas semanas está fundamentada en las expectativas de crecimiento económico de México, en el sano balance fiscal, en el respaldo de las reservas internacionales; así como una debilidad del dólar frente a las divisas en el mundo”, precisó Quiroga.
Dólar vuelve a encumbrarse
Sin embargo, la semana pasada vio un repunte en el tipo de cambio, que se moderó el viernes. El jueves, la cotización interbancaria había finalizado en 20.13 pesos por dólar. La razón es que el dólar ha tenido un cambio de tendencia, por lo menos coyuntural, para fortalecerse frente a otras monedas.
La Reserva Federal (Fed, el banco central estadunidense) podría comenzar a deshacerse de los bonos corporativos que compró el año pasado para calmar los mercados en el punto crítico de la pandemia, anunció la entidad monetaria, lo que reduciría la liquidez en los mercados financieros; toda vez que podría adelantar de 2023 a 2022 el inicio del aumento de las tasas de referencia.
Así, el incremento de la volatilidad podría intensificarse en la medida que se vayan conociendo indicadores económicos fuertes y en la medida que la inflación no fuese transitoria.
Nada está garantizado
“Nada garantiza que la tranquilidad en el mercado cambiario vaya a prevalecer después del resultado electoral. Las sorpresas pueden provocar volatilidad y ajustes temporales en la valorización y reciente tendencia de la moneda mexicana”, reconoció Jorge Gordillo, director general de Análisis Económico y Bursátil de CIBanco.
Muñoz recalcó la influencia de la economía estadunidense en la fortaleza del peso, sin eximir riesgos (las elecciones), pero “no debemos de preocuparnos de las variables exógenas”.
En la medida que los resultados electorales arrojen una situación de confianza, la volatilidad respecto al factor interno debería de seguir tranquila, prevé Quiroga.