En 2020, la mortandad de tortugas caguama en el Golfo de Ulloa, Baja California Sur, llegó a mil 88 ejemplares, mientras en los cuatro años previos sumaron mil 977. Estas cifras rebasan por mucho el límite permisible de 90 ejemplares, señalaron el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y el Centro para la Diversidad Biológica.
“Cuando se creía que era un tema superado, el gobierno de México vuelve a negar que las tortugas mueran en redes de pesca, ignorando evidencia científica”, dijo Alejandro Olivera, representante en México del Cemda. “Y peor aún, ya que el gobierno dejó sin presupuesto al plan de conservación de tortuga caguama desde 2016”.