Por cada dólar invertido en la nutrición durante los primeros mil días de vida de los niños, se tendrá un retorno de 35 dólares, aseguró la directora de Políticas y Programas de Nutrición del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), Anabelle Bonvecchio.
En el Quinto Diálogo Nacional sobre Sistemas Alimentarios, advirtió que después de los primeros mil días de vida es muy difícil revertir los daños ocasionados por la desnutrición, que eleva la probabilidad de que los infantes abandonen sus estudios y ganen menos en la edad adulta debido a que su capacidad de aprendizaje se reduce 70 por ciento.
En el encuentro, organizado en forma virtual por el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), alertó que niños con desnutrición presentan retraso en el crecimiento físico, como baja talla con respecto a su edad y su sistema inmunológico es débil, lo que aumenta el riesgo de fallecer por males infecciosos.
Por ello, subrayó la necesidad de fortalecer las políticas e intervenciones nutricionales a nivel nacional, estatales y municipales de salud, alimentación y protección social a corto y largo plazo.
Ruy López Ridaura, director general del Cenaprece, señaló que en el marco de la Cumbre de los Sistemas Alimentarios, de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a realizarse en septiembre, se deben revisar leyes, reglamentos y normas nacionales para asegurar la adecuada implementación del Código Internacional de Comercialización de Sucédanos de la Leche Materna en México.
La titular del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), María del Rocío García Pérez, informó que está en marcha la estrategia de asistencia alimentaria en los primeros mil días de vida para incrementar la ingesta alimentaria y nutricional de mujeres embarazadas, lactantes, así como de niñas y niños entre los seis meses y dos años de vida que se encuentran en situación vulnerable.