Ciudad de México. El anuncio realizado hoy por la Casa Blanca en el sentido que la administración del presidente Joe Biden seguirá financiando organizaciones civiles y periodistas de investigación para la lucha contra la corrupción en el mundo, no es una respuesta a México por el caso de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad.
Así lo dijeron a La Jornada fuentes de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), quienes indicaron que ese anuncio “no está dirigido” a nuestro país y reiteraron que el reclamo del gobierno de Andrés Manuel López Obrador no es contra una organización no gubernamental, sino contra “un grupo que hace política”.
Este jueves se dio a conocer que en un memorando presidencial, Biden que un pilar de su política exterior es la lucha contra la corrupción a nivel mundial, por lo que ordenó la elaboración de estrategias para combatir este flagelo y entre ellas mantener los apoyos económicos a través de diversas agencias estadundienses a organizaciones y periodistas que se dedican a ese rubro.
“Se trata de una directriz general, no en específico para México. La nota diplomática enviada por el gobierno mexicano no es general, sino respecto a una organización específica que hace política”, señalaron las fuentes consultadas.
El 6 de mayo el gobierno mexicano dirigió a la embajada de Estados Unidos en México una nota diplomática en la que se solicitó aclarar el probable apoyo económico otorgado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) a Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad.
En el documento, enviado por la SRE, se enfatizó que en caso de que su contraparte estadunidense financie a dicha organización, encabezada por Claudio X. González, vulneraría las relaciones de respeto mutuo y no intervención en la relación bilateral, debido a que la administración del presidente López Obrador la considera como un grupo opositor con fines políticos.
Por esa razón el mandatario ha reparado que esas aportaciones “sean injerencistas, intervencionistas y golpistas”.
Hasta ahora, el gobierno de Biden no ha dado respuesta a la comunicación diplomática mexicana.