Como integrante de la extinta Asamblea Legislativa (ALDF), el ex delegado de Coyoacán, Mauricio Toledo Gutiérrez, envió durante los tres años que duró su puesto 26 millones de pesos con 50 centavos en recursos etiquetados al entonces Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF).
Según consta en los decretos de presupuesto de egresos de 2016, 2017 y 2018, esos recursos se asignaron directamente al área donde estaba adscrito su hermano Nelson Francisco, cuyo domicilio fue cateado el pasado martes como parte de una investigación de la fiscalía capitalina por enriquecimiento ilícito durante el tiempo en que fue funcionario en el órgano electoral.
Apenas ocupó el cargo como diputado, en septiembre de 2015, Mauricio Toledo consiguió la presidencia de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública y dentro del presupuesto 2016 aprobado en diciembre de ese año, incluyó los primeros 8 millones de pesos en recursos adicionales al IEDF.
Ese dinero no era para fortalecer actividades institucionales del IEDF, sino que fue asignado “al fortalecimiento y operación de la atención ciudadana y la asesoría legal preventiva, ambas en la contraloría general de dicho instituto”, donde estaba adscrito su hermano como asesor.
Fraternidad incómoda
Nelson Francisco ocupaba la subcontraloría de atención ciudadana y normatividad, debió pedir licencia para separarse del cargo luego de que en 2014 la entonces Procuraduría General de Justicia capitalina inició una investigación al ser acusado de extorsionar a trabajadores del IEDF.
Se le siguió un proceso luego de exhibirse en redes sociales un video donde se le observa que recoge dinero y vales de despensa de personal del organismo, pero regresó al siguiente año como asesor, según consta en las actas de sesiones del Comité de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios Generales, a las que asistía en representación del contralor Jorge Alberto Diazconti.
En la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública –que tenía en la vicepresidencia al actual diputado federal del PAN, Luis Alberto Mendoza Acevedo–, Mauricio Toledo etiquetó en el presupuesto de egresos de 2017 otros 10 millones de pesos al IEDF “para un programa de capacitación y honorarios para la puesta en marcha del Sistema Nacional Anticorrupción, que sería ejercido por la contraloría de dicho instituto”.
Dentro del presupuesto 2018, 8 millones de pesos con 50 centavos, también se destinaron a la contraloría interna del IEDF “para fortalecer, implementar y adecuar la estructura y el programa de honorarios para la puesta en marcha del Sistema Nacional Anticorrupción”, que en la ciudad se terminó de integrar apenas en marzo pasado.