Bogotá. Colombia reabrió el miércoles su frontera terrestre y fluvial con Venezuela tras un cierre de más de 14 meses como parte de sus esfuerzos para contener la pandemia del Covid-19, aunque el tránsito se hará de manera gradual y con algunas restricciones, informó el Gobierno.
El país sudamericano de 50 millones de habitantes cerró sus fronteras desde el 17 de marzo de 2020, cuando empezó la pandemia.
Una resolución del Ministerio del Interior autoriza "la apertura gradual de los pasos terrestres y fluviales de la frontera con la República Bolivariana de Venezuela, a partir de las 00:00 horas del 2 de junio, sin perjuicio de que se continúen aplicando las medidas de bioseguridad establecidas por el Ministerio de Salud y Protección Social".
La autoridad migratoria de Colombia anunció que regirán horarios y se establecerán restricciones para el ingreso de acuerdo con el último número del documento de identidad de las personas.
De lado venezolano, donde aún rige un cierre fronterizo, el prefecto de la localidad de Ureña, Urley Moreno, dijo que los militares reforzaron el bloqueo a los accesos a los puentes fronterizos.
Agregó que por ejemplo en el Puente Internacional Francisco de Paula Santander, que une a Ureña con la ciudad colombiana de Cúcuta, los uniformados colocaron una "pared valla" o grandes paneles móviles, para evitar aglomeraciones de personas intentando cruzar.
Sin embargo, la mañana del miércoles no hubo acumulación de gente pasando a Colombia por los puentes, en los que del lado venezolano se mantienen gigantescos contenedores para obstaculizar el paso. Los migrantes, no obstante, continúan usando las trochas, o pasos informales, para llegar a territorio del vecino país, agregó el prefecto.
Colombia es el principal destino para los emigrantes venezolanos que huyen de la prolongada crisis social y económica en la nación petrolera.
Actualmente más de 1,7 millones de venezolanos residen en Colombia, una cifra que puede aumentar en los próximos meses con la decisión del Gobierno del presidente Iván Duque de concederles un estatuto de protección temporal por 10 años.
Los dos países, sin relaciones diplomáticas y que comparten una porosa frontera de 2 mil 219 kilómetros, se lanzan recriminaciones mutuas.
Mientras Bogotá acusa al Gobierno de Nicolás Maduro de albergar en su país a líderes de las disidencias de las FARC y del Ejército de Liberación Nacional vinculados con el narcotráfico, Caracas señala a Duque de hacer parte de un plan para derrocar al mandatario socialista con el apoyo de Estados Unidos.
Colombia reabrió el 19 de mayo sus fronteras terrestres, fluviales y marítimas con Brasil, Ecuador, Perú y Panamá.