Ginebra. El director general de Organización Mundial de la Salud (OMS) Tedros Adhanom Ghebreyesus elogió este lunes la decisión "histórica" de los Estados miembros de fortalecer la agencia tras una crisis que dejó al descubierto sus deficiencias, pero subrayó la urgencia de un tratado sobre pandemias para evitar que se repitan los mismos errores.
Más de un año después del comienzo de la pandemia que ha provocado 3,5 millones de muertes en el mundo, los integrantes de la OMS después de una semana de debates decidieron reforzar al organismo.
Pero aún no se definieron las líneas directrices de la reforma. Algunos países son reticentes a otorgar más poderes a la OMS en aras de su soberanía.
Los miembros además decidieron postergar hasta noviembre los debates sobre la necesidad de un tratado o convención sobre las pandemias, un instrumento exigido desde hace semanas por la OMS y varios países, entre ellos Francia y Alemania.
Para Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien habló al final de la Asamblea, un acuerdo internacional vinculante es lo que "más contribuirá a fortalecer la OMS y la seguridad sanitaria mundial".
"Actualmente, los patógenos tienen más poder que la OMS", resumió. No obstante, al cerrar esta 74ª Asamblea Mundial de la Salud, que tuvo lugar online monitoreada desde Ginebra, calificó a la resolución como "una de las más importantes de la historia de la organización"
El objetivo clave de la reunión, que destacó en los debates, es la reforma de la agencia y su capacidad para coordinar la respuesta a las crisis sanitarias globales y prevenir futuras epidemias, en tanto la OMS y la comunidad internacional no pudieron prever la pandemia de covid-19.
Durante esta semana, los miembros tuvieron acceso a varios informes de expertos independientes, que revelaron las fallas de la OMS pero también las de los países ante covid-19, y solicitaron reformas profundas de los sistemas de alerta y prevención.
Uno de estos informes considera que la pandemia podría haber sido evitada y que la OMS declaró demasiado tarde, a fines de enero de 2020, una emergencia sanitaria de alcance internacional, o sea, el nivel más alto de alerta.
Los informes "son unánimes en cuanto a que el mundo necesita una OMS más fuerte en el centro de la arquitectura sanitaria mundial", resumió Tedros.