París. Naomi Osaka ha dicho "hasta aquí". Ante las amenazas lanzadas por los cuatro torneos de Grand Slam por su negativa a comparecer ante la prensa en Roland Garros, la tenista japonesa, número 2 mundial, decidió zanjar el asunto con su retirada del torneo parisino.
La tenista de 23 años explicó su decisión en una larga carta publicada este lunes en su cuenta Twitter que eclipsó la actualidad puramente deportiva del torneo, en la que destacaron las victorias de Roger Federer y Serena Williams, además de la primera victoria en Roland Garros del N.2 del mundo Daniil Medvedev.
"Es una situación que no había imaginado ni buscado cuando tuiteé el otro día. Creo que lo mejor para el torneo, los demás tenistas y mi bienestar es que me retire (del torneo) para que cada uno pueda volver a concentrarse en el tenis", escribió en Twitter la japonesa.
"Me voy a retirar un cierto tiempo de las pistas, pero, en el momento preciso, quiero realmente trabajar con el circuito para debatir los medios para mejorar las cosas para los jugadores, la prensa y los aficionados", anunció asimismo.
"Nunca quise crear un problema y comprendo que el momento no era bueno y que mi mensaje habría podido ser más claro", precisó.
Todo comenzó el pasado miércoles cuando Osaka sorprendió al anunciar en un comunicado, publicado también en las redes sociales, su decisión de no presentarse ante la prensa en Roland Garros para preservar su "salud mental".
Pero la situación se envenenó después de su partido de primera ronda el domingo, cuando ejecutó su amenaza y no hizo declaraciones a la prensa, lo que originó una gran reacción de los cuatro Grand Slam, que amenazaron incluso a la japonesa con la exclusión.
— Episodios depresivos -
La vencedora de cuatro 'grandes' (US Open en 2018 y 2020, Abierto de Australia en 2019 y 2021) fue sancionada en un primer momento con una multa de 15.000 dólares.
Pero fue la amenaza de sanciones mayores lo que acabó con una solución tajante.
"Si continúa rechazando sus obligaciones mediáticas durante el torneo, se expone a otras consecuencias relacionadas con las infracciones del código de conducta (…) Y pueden llevar hasta la apertura de una investigación que podría desembocar en sanciones aún más importantes y una suspensión de los torneos de Grand Slam", amenazaron los cuatro 'grandes' en un comunicado.
Pero apenas 24 horas después anunció su drástica decisión de abandonar el torneo parisino, no sin explicarse.
"La verdad es que atravesé largos periodos de depresión desde el US Open 2018 (que conquistó) y me costó recuperarme".
— El cuadro femenino pierde acento español -
"Cualquiera que me conozca sabe que soy introvertida, y todo aquel que me haya visto durante los torneos se habrá dado cuenta que a menudo llevo unos auriculares porque eso me ayuda a atenuar mi ansiedad social", justificó.
"Aunque la prensa que cubre el tenis ha sido siempre bondadosa conmigo (y me disculpo ante todos los periodistas simpáticos a los que haya podido ofender), no estoy cómoda hablando en público y siento una inmensa ansiedad cuando debo dirigirme a la prensa mundial", insistió la joven.
Aunque por el momento la cruzada de Osaka no ha sumado adeptos entre los demás tenistas, y Rafa Nadal, la N.1 del mundo Ashleigh Barty, o la ganadora de Roland Garros 2020 Iga Swiatek se han desmarcado de sus palabras.
Habrá que ver ahora si la decisión de Osaka sirve para que los focos se centren ahora en una cuestión a menudo tabú en el deporte: la salud mental de los deportistas de élite.
Más allá del 'affaire Osaka' la 'Armada' española en Roland Garros sigue viento en popa sobre la arena parisina; Jaume Munar, Carlos Alcaraz y Pedro Martínez también alcanzaron este lunes la segunda ronda del Grand Slam sobre tierra batida, lo mismo que el suizo Roger Federer, muy solvente en su regreso a París ante Denis Istomin.
También se clasificaron este lunes a segunda ronda el brasileño Thiago Monteiro y el argentino Federico Delbonis.
Peores noticias para el tenis español y sudamericano llegaron el cuadro femenino.
La española Garbiñe Muguruza y la argentina Nadia Podoroska, que encaraban esta edición de Roland Garros con ambiciones fundadas en sus actuaciones pasadas en el Grand Slam parisino, perdieron este lunes en primera ronda ante la ucraniana Marta Kostyuk y la suiza Belinda Bencic respectivamente.
La otra representante sudamericana en el cuadro femenino del torneo, la joven tenista colombiana María Camila Osorio (98ª del mundo) perdió en su estreno en Roland Garros ante la estadounidense Madison Brengle (84º) por 7-5 y 6-4.
También se despidieron en primera ronda las españolas Lara Arruabarrena (192ª), tras perder 6-2, 6-3 ante la rusa Varvara Gracheva (88ª), y Sara Sorribes (57ª), superada por la china Saisai Zheng (57ª).