Washington. La inflación anual en Estados Unidos alcanzó en abril 3.6 por ciento, el nivel más alto en un año, debido a un aumento de la demanda tras la reapertura de la economía y las dificultades mundiales de abastecimiento, informó el Departamento de Comercio.

Estas cifras alimentan el temor a una inflación alta más duradera que lleve a la Reserva Federal (Fed) a endurecer su política monetaria, como han sugerido varios de sus responsables. No obstante, su presidente, Jerome Powell, considera prematuro emprender ese camino, debido al riesgo de ralentizar el ritmo de crecimiento después de la crisis causada por la pandemia de Covid-19.

La Fed apuesta a una inflación de 2 por ciento a largo plazo y al pleno empleo, antes de endurecer la política monetaria.

El titular del banco central estadunidense ha dicho reiteradamente que la inflación superior a 2 por ciento será transitoria y que se espera que las cadenas de suministro se vayan adaptando para mejorar su eficiencia.

El índice subyacente (PCE) de precios al consumo basado en los gastos personales –que excluye los precios más volátiles, como alimentos y energía– subió 0.7 por ciento en el mes. Fue la mayor alza de la medición subyacente desde octubre de 2001 y se produjo tras el alza de 0.4 por ciento en marzo.

En 12 meses, el PCE subyacente avanzó 3.1 por ciento, el mayor nivel desde julio de 1992, luego de haber marcado un alza de 1.9 por ciento en marzo. Economistas encuestados por Reuters estimaban una lectura anual de 2.9 por ciento.

El índice inflacionario se incrementó en ese nivel por la baja base de comparación respecto de la primavera del año pasado en plena pandemia.

Las lecturas anualizadas podrían permanecer elevadas por un tiempo por los denominados “efectos de base” antes de empezar a disminuir más adelante este año.

En tanto, los ingresos de los hogares tuvieron en abril una histórica caída de 13.1 por ciento, luego de un incremento de 20.9 por ciento en marzo, impulsado por los cheques enviados por el gobierno federal a las familias para estimular la economía.

Se modera gasto del consumidor

El gasto del consumidor, que representa más de dos tercios de la actividad económica de Estados Unidos, aumentó 0.5 por ciento en abril, frente al incremento de 4.2 por ciento en marzo, cifra que fue revisada al alza.

Si bien el gasto del consumidor se moderó a medida que se fue disipando el impulso de las ayudas fiscales directas, las familias acumularon al menos 2.3 billones de dólares en ahorros durante la pandemia, lo que debería sostener la demanda interna.

Los salarios también están aumentando porque las compañías buscan atraer más trabajadores a fin de expandir la producción.