Buenos Aires. Mientras los nuevos contagios por coronavirus alcanzaron a poco más de 41 mil personas en todo el país en 24 horas, en medio de una violenta campaña de la oposición de la derechista alianza Cambiemos que se niega a cumplir las medidas de emergencia e incita a la población a salir a las calles, militantes de un minoritario movimiento ultraderechista Republicanos Unidos se manifestaron con rudeza afuera de la residencia del oficialista gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bodet, y amenazaron con incendiar las casas de sus funcionarios, colaborando con la escalada violenta de los opositores.
Esto sucedió el pasado 25 de mayo, pero el atentado contra una sede partidaria del oficialista Frente de Todos en Bahía Blanca y otros hechos, así como marchas minoritarias que llamaban a la desobediencia civil, donde periodistas de distintos medios aquí y en la provincia de Santa Fe fueron amenazados e incluso atacados, silenció otras informaciones.
Ante esta situación, diputados nacionales por la provincia de Entre Ríos, el Frente de Todos y la Juventud Peronista, entre otros sectores, repudiaron esta acción como un atentado a la democracia, en momentos en que el gobernador está aislado en su casa enfermo de Covid-19.
También hubo repudio desde la Cámara de Diputados de Entre Ríos y personalidades políticas señalaron la irresponsabilidad criminal de estos actos en momentos “tan trágicos”.
Por otra parte, en la provincia de La Rioja la oposición también intentó organizar una “pueblada” contra las restricciones impuestas en estos días por la administración nacional, a lo que se adhirió el gobernador, Ricardo Quintela.
En declaraciones al portal Política Argentina, la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Teresa Madera, sostuvo que se gesta “desde la oposición un clima de malestar y zozobra que viene a enervar a mucha gente que la está pasando mal por la pandemia, que todos sabemos se trata de una situación a nivel mundial”. Nota ampliada en @lajornadaonline https://bit.ly/3fPm3Xh