De los dos hombres que aconsejan a Alejandro Alito Moreno, ex gobernador de Campeche y hasta ahora presidente nacional del PRI, el más influyente es el español Antonio Sola, ídolo de los medios españoles que no dudan en decir de él que es “un creador de presidentes”.
Es el cerebro de la guerra sucia desatada contra el actual presidente Andrés Manuel López Obrador por el panista Felipe Calderón y la derecha político-empresarial hoy coordinada por Claudio X. González.
El segundo en el orden al bate es el cubano anticastrista Vladimir de la Torre, un hombre que presume haber sido presentador de TeleSur (en ese canal nadie lo conoce y no hay constancia de que haya trabajado ahí), y periodista de la agencia cubana Prensa Latina, donde apenas laboró un año. En realidad lleva algunos años colaborando como articulista en El Expreso de Campeche, publicación afín a Alito Moreno.
Fuentes priístas que pidieron el anonimato explicaron a La Jornada que Sola aconseja desde la distancia aunque también se deja ver de vez en cuando, como a finales de marzo en un restaurante de Campeche en compañía del ex gobernador de Coahuila Rubén Moreira, muy cercano a Alito Moreno.
La razón por la que Sola no ha sido contratado formalmente es porque “cobra demasiado”, al decir de las fuentes consultadas. Eso no impide que el líder del PRI le tenga plena confianza y siga sus consejos.
El caso del cubano es diferente. No tiene las luces del español pero guarda una vieja amistad con Alito. El sí trabaja de planta porque no sale tan caro como Sola. En ambos casos hay total opacidad sobre el origen de los recursos que van a parar a ambos personajes.
El historial de Sola habla por sí solo. A sus 48 años presume de haber sido el estratega principal en las campañas electorales de José María Aznar y Mariano Rajoy, del Partido Popular (derecha española), hoy metidos en broncas con la justicia por manejos turbios de los fondos que manejaba el partido.
También fue piedra angular de las campañas de Vicente Fox y de Felipe Calderón, con quien la guerra sucia alcanzó cotas nunca vistas en la política mexicana dizque moderna. También asesoró al colombiano Juan Manuel Santos y al haitiano Michel Martelly.
Es tan querido y venerado en España que fue condecorado con la Orden Especial al Mérito Civil que concede graciosamente la monarquía a propuesta del gobierno.
“Creo que es posible aportar un grano de arena para construir un mundo mejor a través de la política. Lo creo de verdad y lo demuestro con hechos”, declaró Sola a la prensa española quitado de la pena.
El objetivo del joven Alito Moreno, que acostumbra a decir que Carlos Salinas de Gortari “es mi padrino”, es ser nominado a la Presidencia de la República en 2024, con o sin alianzas. Y esa política de entregarse junto con el PAN y el PRD en brazos de Claudio X. González sigue causando escozor en el seno del tricolor. No son pocas ni mucho menos irrelevantes las voces priístas que critican con dureza tal decisión.
Si el joven Alito no logra arrebatar a Morena el control del Congreso y además pierde Campeche, donde nombró candidato a su sobrino Christian Castro Bello en una decisión del más puro estilo nepotista, sus días al frente del tricolor podrían estar contados.