Bruselas. Los líderes de los 27 países miembros de la Unión Europea (UE) acordaron ayer cerrar el espacio aéreo a Bielorrusia y preparar más sanciones para asfixiar económicamente al gobierno de Alexandr Lukashenko, en respuesta al incidente en el que Minsk forzó a un avión de la compañía Ryanair a aterrizar de emergencia para detener a un disidente bielorruso y su pareja.
En las conclusiones adoptadas por el Consejo Europeo, los líderes de la Unión Europea (UE) condenaron el “inaceptable” episodio que “puso en riesgo la seguridad aérea” y reclaman la inmediata puesta en libertad del periodista Roman Protasevich y su pareja, Sofia Sapega, que viajaban de Atenas a Vilnius.
Los jefes de Estado y de gobierno pidieron tomar las “medidas necesarias” para prohibir que las aerolíneas bielorrusas sobrevuelen el espacio aéreo y aterricen en aeropuertos de la UE.
Instaron a las compañías europeas a evitar sobrevolar el país y reclamaron una investigación a la Organización de Aviación Civil Internacional sobre el episodio.
Los mandatarios encargaron ampliar las sanciones individuales contra los responsables de la deriva autoritaria en Bielorrusia y pidieron a la Comisión Europea y al alto representante para política exterior, Josep Borrell, estudiar nuevas sanciones para atacar a sectores económicos del gobierno.
Manifestaron su solidaridad con Letonia por la expulsión “injustificada” de todos sus diplomáticos en Bielorrusia, en represalia por el retiro de la bandera oficial bielorrusa durante el campeonato mundial de hockey sobre hielo.
La crisis en la antigua república soviética se remonta al pasado agosto, con las elecciones que la oposición calificó de fraudulentas y que dieron un sexto mandato a Lukashenko, en el poder desde 1994, y fueron criticadas por la UE ante el apoyo de Rusia. En este contexto, el bloque europeo ha adoptado tres tandas de sanciones y mantiene en su lista negra a 88 funcionarios de la cúpula bielorrusa y siete entidades.
El gobierno de Reino Unido ordenó a aviones británicos evitar el espacio aéreo de Bielorrusia.
Tanto Estados Unidos como la UE exigieron la liberación de Protasevich, que Bielorrusia había añadido a su lista de “personas implicadas en actividades terroristas”.
La televisión estatal bielorrusa transmitió un corto video en el que Protasévich “confiesa” que había estado organizando manifestaciones de protesta contra el gobierno.
En el video, el joven opositor parecía exhibir marcas en el rostro, y afirmó que estaba siendo tratado “de acuerdo con la ley”.
La prensa opositora afirmó que Protasevich, de 26 años, tenía signos de que habría sido maltratado.
Al cierre de esta edición, el grupo islamita Hamas, que gobierna la franja de Gaza, negó cualquier participación en el aterrizaje forzoso del avión de la compañía Ryanair en Minsk.