Después de que el gobierno de Estados Unidos decretara el cierre del centro de detención migratoria en el condado de Irwin, Georgia (ICDC, por sus siglas en inglés), donde decenas de mujeres acusaron haber sido víctimas de intervenciones quirúrgicas ginecológicas no autorizadas, el cónsul general de México en Atlanta, Javier Díaz de León, confió en que esta determinación sea el principio para revisar la actuación de las autoridades de ese país.
En entrevista con La Jornada, el diplomático refirió que el consulado a su cargo sigue con el apoyo para las 10 mexicanas que denunciaron malas prácticas médicas en el ICDC; de ellas, cuatro involucrarían algún tipo de cirugía.
“El gobierno de México se congratula por la decisión, la cual es coherente con su posición y con lo que desde la campaña prometió la actual administración (de Joe Biden). Puede ser el inicio de un ejercicio de revisión a fondo de cómo han estado operando las autoridades migratorias y este tipo de centros de detención en Estados Unidos.”
Recordó que desde que se hicieron públicas las denuncias, en septiembre del año pasado, el gobierno mexicano dirigió una nota diplomática al de Estados Unidos en la que manifestó su preocupación “al más alto nivel” por estos casos y le solicitó una investigación a fondo.
“El anuncio hecho por el secretario de Seguridad Interior, Alejandro Mayorkas, de cerrar el ICDC, se alínea con lo expresado por nuestro gobierno sobre este caso, y en términos más amplios, en la situación que existe en los centros de detención migratoria que opera el Servicio de Control de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés).”
Díaz de León indicó que las representaciones consulares de México realizan visitas periódicas a los centros de detención de migrantes en todo territorio estadunidense. En el caso de Georgia, existen otros dos. Durante esas visitas, los connacionales ahí detenidos han denunciado diversos tipos de abusos, la mayoría referentes a la mala calidad en los servicios médicos, problemas de alimentación e incertidumbre sobre la situación de sus casos, indicó el cónsul.
En el ICDC, al menos 57 mujeres migrantes de varias nacionalidades detenidas fueron víctimas de intervenciones quirúrgicas no autorizadas, como histerectomías, negligencia médica y otros abusos por parte del ginecólogo Mahendra Amin, colaborador de ese centro que era administrado por LaSalle Corrections, empresa privada bajo contrato del ICE.
Las víctimas, con el apoyo de organizaciones civiles, presentaron una demanda colectiva contra autoridades estadunidenses y contra el médico. El consulado de México en Georgia mantiene contacto con las compatriotas afectadas y con los abogados para apoyar los procesos judiciales, detalló Díaz de León.