Petróleos Mexicanos (Pemex), decimotercer productor de crudo en el mundo, reconoció como factor de riesgo su nivel sustancial de endeudamiento y advirtió que esto puede afectar su salud financiera y su capacidad para pagar su deuda.
En su reporte financiero anual, entregado a la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés), alerta: “Tenemos una cantidad sustancial de endeudamiento y otros pasivos, estamos expuestos a restricciones de liquidez, lo que podría dificultarnos la obtención de financiamiento en términos favorables y podría afectar adversamente nuestra condición financiera, resultados de operación y capacidad para pagar nuestra deuda”.
Pemex coloca bonos en los mercados de valores globales por lo que debe informar a los potenciales inversionistas los factores de peligro que la petrolera considera relevantes, sin descartar riesgos capaces de influir en los precios de sus notas.
En su informe, la empresa productiva del Estado explica: “Tenemos una cantidad sustancial de deuda, la que hemos contraído principalmente para financiar los gastos de capital necesarios para llevar a cabo nuestros proyectos de inversión y para financiar gastos operativos.
“Debido a la fuerte carga fiscal, nuestro flujo de efectivo de las operaciones no ha sido suficiente para financiar nuestros gastos de capital y otros en los últimos años y, en consecuencia, la deuda ha aumentado significativamente y el capital de trabajo se ha deteriorado”.
En el informe, que fue entregado a las autoridades bursátiles estadunidenses el 17 de mayo, Pemex refiere: “En los últimos años, nuestro nivel de endeudamiento en relación con nuestras reservas de petróleo se ha incrementado sustancialmente”. Además, “no hay garantía de que sigamos teniendo acceso al capital en condiciones favorables o en cualquier condición”.
Al 31 de diciembre de 2020, el endeudamiento total, incluidos los intereses devengados, fue de 2 billones 258.7 mil millones de pesos lo que representó un aumento de 13.9 por ciento en comparación con el endeudamiento total de 1 billón 983 mil millones en 2019.
El 28.3 por ciento de la deuda, equivalente a 640 mil millones de pesos, incluidos los intereses devengados, está programado para vencer en los próximos tres años.
“Nuestro nivel de deuda puede aumentar aún más a corto o mediano plazos como resultado de nuevas actividades de financiamiento o depreciación futura del peso en comparación con el dólar estadunidense, y puede haber un efecto adverso en nuestra condición financiera, resultados de operación y posición de liquidez”, advierte a los inversionistas.
Otro factor de riesgo identificado son las reducciones en las calificaciones crediticias, las cuales podrían afectar el acceso a los mercados y el costo de financiamiento.
La volatilidad de los precios en crudo y gas afecta negativamente los ingresos y flujos de efectivo de Pemex, así como la cantidad de reservas de hidrocarburos que tiene derecho a extraer y vender.
Pemex, al ser una compañía de petróleo y gas, está expuesta a riesgos de producción, equipo, transporte, ciberataques, fallas en sus sistemas de tecnología de información, así como bloqueos a sus instalaciones, sabotaje, terrorismo y actos criminales que afectarían su negocio, sus resultados y su situación financiera.
Otro factor de riesgo identificado es el aumento de la competencia en el sector energético que podría afectar negativamente el desempeño comercial y financiero de la petrolera.