Bogotá. Jesús Santrich, uno de los líderes más importantes de la desmovilizada guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que rechazaron un acuerdo de paz y decidieron continuar la lucha armada, murió en un ataque en Venezuela, informó ayer el grupo disidente que atribuyó la operación militar a un comando del ejército colombiano.
El grupo aseguró que el ataque se dio en territorio venezolano, cerca de la frontera con Colombia.
Seuxis Paucias Hernández, más conocido como Jesús Santrich, apoyó en un principio el acuerdo de paz de 2016, pero cuando fue solicitado en extradición por Estados Unidos por cargos de narcotráfico, anunció que volvía a la lucha armada.
“La camioneta en la cual viajaba el comandante fue atacada con fuego de fusilería y granadas”, informó en su página de Internet la Segunda Marquetalia, de las disidencias de las FARC.
El grupo aseguró que el comando responsable del ataque fue evacuado en un helicóptero hacia Colombia.
Horas antes, el ministro de Defensa de Colombia, Diego Molano, había declarado que el gobierno trataba de confirmar la muerte de Santrich, quien de acuerdo con información de inteligencia, murió en medio de un enfrentamiento entre grupos armados ilegales.
“De confirmarse este hecho, se comprueba que en Venezuela se refugian narcocriminales”, sostuvo Molano.
El gobierno colombiano no hizo ninguna declaración tras la confirmación de la noticia.
Santrich desapareció a finales de junio de 2019 tras abandonar a sus escoltas en una zona de capacitación y reincorporación para ex combatientes en el departamento de Cesar, cerca de la frontera con Venezuela, en lo que fue considerado por el gobierno de Colombia como una burla al acuerdo de paz.
El líder guerrillero, de 53 años, asumió el cargo de congresista a comienzos de junio de 2019, después de que la Corte Suprema ordenó su libertad, luego de que otro tribunal le reconoció su condición de legislador tras haber permanecido más de un año en la cárcel acusado de narcotráfico.
El ex negociador de las FARC tenía uno de los 10 escaños en el Congreso que le fueron asignados al grupo armado, convertido en partido político, tras el acuerdo de paz que dio fin a un conflicto de más de medio siglo cuyo saldo se ubica en 260 mil muertos.
Colombia ofrecía una recompensa de 810 mil dólares por información que permitiera ubicar y capturar a Santrich.
El gobierno de Venezuela no respondió a una solicitud de comentarios sobre la muerte de Santrich.