Ciudad de México. Los gobiernos de México y Estados Unidos establecerán “un nuevo enfoque” en la cooperación bilateral en materia de seguridad.

Además, reestablecieron los canales de comunicación y confianza luego de que éstas se cimbraran debido a que la administración estadunidense no alertara a la mexicana sobre las acusaciones de presuntos nexos con el crimen organizado del ex titular de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, lo que derivó en su detención y posterior excarcelación.

Este jueves, funcionarios “de alto nivel” de los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y Joe Biden tuvieron una reunión bilateral sobre de seguridad, que se desarrolló en la sede de la cancillería mexicana a puerta cerrada, donde se habló de la necesidad de alcanzar un nuevo rumbo bilateral en la materia, informaron a este diario asistentes al intercambio.

Los funcionarios consultados señalaron que se acordó “cambiar el enfoque” en las estrategias, que en administraciones pasadas se basó en la persecución de grupos del crimen organizado y el apoyo de Estados Unidos a México en equipo, tecnología y capacitación para las corporaciones de seguridad mexicanas.

De acuerdo con quienes participaron este jueves en los encuentros, ambas partes convinieron construir una nueva visión. El lado mexicano, dijeron, insistirá en que se oriente hacia el impulso de políticas sociales más que en el financiamiento de equipos.

“Todo el encuentro se desarrollo en términos cordiales”, indicaron las fuentes ante la interrogante de si las reformas del Congreso mexicano para limitar la presencia de elementos de las agencias estadunidenses en México causaron enojo en su contraparte. “Los puentes están restablecidos”, agregaron.

Se espera que en unas horas, los gobiernos de ambas naciones emitan un comunciado conjunto sobre este intercambio en materia de seguridad.

La delegación mexicana fue encabezada por el canciller Marcelo Ebrard Casaubón y por la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez; mientras por la representación de la Casa Blanca acudió el director general para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, Juan González, y el encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos en México, John Creamer, así como funcionarios del Departamento de Estado.