Ciudad de México. La Junta de Gobierno del Banco de México (BdeM) decidió este jueves, de manera unánime, mantener en 4.00 por ciento la tasa de interés de referencia, ante mayores presiones inflacionarias.
El banco central resaltó que desde su última reunión la inflación general anual resintió una ligera apreciación del tipo de cambio y mayores tasas de interés, lo que hizo que aumentara más de lo previsto.
“Las expectativas de inflación para 2021 aumentaron y las de mediano y largo plazos se mantuvieron estables en niveles superiores a la meta de 3 por ciento”, apuntó.
Advirtió que en un entorno altamente incierto, los riesgos para la inflación, la actividad económica y los mercados financieros plantean retos importantes para la política monetaria del país.
Por lo anterior, dijo, el ajuste de precios relativos debe ser ordenado para evitar afectaciones en la formación de precios y las expectativas de inflación.
Es la segunda ocasión consecutiva en la que los miembros del BdeM optan por dejar sin cambios la tasa que determina el costo del dinero para las empresas y familias mexicanas.
La decisión de esta segunda reunión del año estuvo en línea con lo que anticipaban analistas del sector financiero, quienes han advertido que los altos niveles de inflación no favorecen un entorno de menores tasas.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, durante abril la inflación se ubicó en 6.08 por ciento en su comparación anual, nivel fuera del objetivo del BdeM, que es de 3 por ciento +/- un punto porcentual.
La tasa de interés de referencia es una herramienta del instituto central, la cual utiliza para impulsar la actividad económica a partir de reducir el costo del financiamiento o para restringirla con el propósito de controlar un alza en la inflación, cuando la aumenta.