Manchester. El Manchester City se consagró campeón de la Liga Premier a falta de tres fechas en la temporada, luego de que su escolta inmediato, el Manchester United, perdió ayer 2-1 ante el Leicester.
Al poner fin al reinado del Liverpool como monarca, Pep Guardiola conquistó su tercer título de la liga inglesa en cuatro años, sumándolo al trío de laureles domésticos que obtuvo como entrenador tanto en el Barcelona como en el Bayern Múnich.
Además, el catalán podría coronar la temporada si el próximo 29 de mayo el Manchester City derrota al Chelsea y conquista la Liga de Campeones de Europa, que sería el primer título internacional del club.
El United solía ser el equipo dominante del futbol inglés, pero el City es hoy por hoy el referente indiscutido con cinco títulos en 10 temporadas desde que se proclamó campeón de la Premier en 2012.
La transformación
Se lo deben al flujo de dinero de Abu Dabi en 2008, transformando a un club que recién en 1999 merodeaba en la Tercera División y cuyos títulos previos de la máxima categoría se remontaban a 1937 y 1968.
El séptimo título liguero para el Manchester City fue posible tras la derrota del United en casa frente al Leicester, que de esta manera recupera su puesto en el podio y da un gran paso hacia la clasificación para la próxima Champions.
Con un panorama de cuatro partidos en una semana –el United vuelve a jugar el jueves contra el Liverpool–, el técnico mancuniano Ole Gunnar Solskjaer sacó un equipo de suplentes y los Foxes no dejaron escapar la oportunidad de llevarse los tres puntos de Old Trafford.
El joven Luke Thomas adelantó a los visitantes al poco de iniciarse el encuentro (10), pero Mason Greenwood empató unos minutos después (15).
En la segunda parte, el central turco Çaglar Söyüncü marcó de cabeza el definitivo 2-1 (66) del triunfo del Leicester y del título para el City.
Apenas unos minutos después de sonar el silbatazo final en Old Trafford, se desplegó una pancarta con la frase “Campeones” en la entrada del Etihad Stadium.
Aficionados del City prendieron bengalas azules y exhibieron réplicas miniatura del trofeo de la Premier. Algunos podrán volver al estadio, un máximo de 10 mil, para verlos recibir el cetro de verdad tras el último partido de la temporada contra el Everton, el 23 de mayo.
“Ha sido una temporada y un título de campeón sin comparación. Ha sido el más duro. Siempre se recordará la manera en la que lo hemos ganado”, declaró Guardiola en los medios del club.
Por su parte, el capitán del City, Fernandinho, aseguró que han “echado demasiado de menos a la afición. Queríamos lograr esto por ellos. Vamos a disfrutar este momento y ojalá que los hinchas también. Que no tengan duda que haremos todo lo posible para traer el trofeo de la Champions”.
En una temporada con un calendario asfixiante por la pandemia y que exprimió los recursos de los equipos, el City llegó a estar ocho puntos detrás del liderato en noviembre, en undécimo lugar tras ocho partidos.
El City mantiene una ventaja irreversible de 10 puntos al frente de la Liga y añadió su segundo títu-lo de la temporada tras alzar la Copa de la Liga el mes pasado.
Son el equipo con más goles anotados, 72, pese a jugar sin delantero de referencia, y fueron también el que menos encajó en la Liga, 26, gracias al resurgir del central John Stones haciendo dupla con Ruben Dias, portugués que fichó previo a la temporada por 68 millones de euros.
Ahora el City cuenta con siete títulos de Liga en sus vitrinas, lejos del récord de 20 del United. Pero su vecino no sale campeón desde que Alex Ferguson se retiró como técnico en 2013.