Guadalajara, Jal., Cerca de 600 habitantes de siete comunidades rurales del municipio de Teocaltiche, en la región de los Altos de Jalisco, han abandonado sus hogares debido a los enfrentamientos entre grupos criminales ocurridos el pasado viernes, según cifras de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ).
Este lunes, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, del partido Movimiento Ciudadano, viajó a esa localidad limítrofe con Zacatecas.
Los ciudadanos que huyeron de la violencia vivían en los poblados El Saucito, Rancho Mayor, Rancho Aguatinta, El Salto, Los Pocitos, Los Sauces y El Rosario.
Inicialmente se trasladaron a un albergue en la parroquia del Divino Salvador, en la comunidad de Mechoacanejo, y posteriormente se refugiaron con familiares en esa localidad, Teocaltiche, Villa Hidalgo y otros lugares cercanos, precisó la CEDHJ.
Hasta antes de la llegada de Alfaro, acompañado de funcionarios estatales, pobladores, religiosos y autoridades municipales brindaron hospedaje, medicamentos, despensas y atención sicológica a los expulsados.
La defensoría advirtió que de prolongarse este desplazamiento se requerirán medidas de largo alcance para proporcionar a los afectados vivienda, salud, educación, empleo y servicios básicos.
La CEDHJ identificó “como detonante de esta escalada de violencia la desaparición de tres personas en El Saucito” y reiteró su llamado a los tres niveles de gobierno para que intervengan cuanto antes en los Altos, específicamente en el municipio de Teocaltiche.
Tras la llegada del convoy de funcionarios estatales escoltados por numerosas patrullas, el gobernador evitó hablar de los tres desaparecidos y negó que esté ocurriendo un desplazamiento forzado. “Lo que sucede es que ante las amenazas de posibles enfrentamientos la gente se fue por precaución; es importante entender la naturaleza del fenómeno”.
Anunció que la policía estatal instalará una base de operaciones permanente en el municipio en coordinación con el Ejército y la Guardia Nacional.
En octubre pasado la policía estatal intervino la corporación local por sospechas de infiltración del crimen organizado.
“Venimos a dejar un mensaje claro: no vamos a agachar la cabeza. Vengo a decir al pueblo de Teocaltiche que vamos a estar presentes con todos los elementos que sean necesarios para recuperar la paz y la tranquilidad del municipio”, dijo Alfaro en un video que publicó en redes sociales acompañado de la alcaldesa Carolina Reyes y del párroco de la localidad, Manuel Sandate, quien con apoyo de la comunidad abrió el albergue para desplazados en Mechoacanejo.
Alfaro anunció que la Secretaría del Sistema de Asistencia Social está recuperando menaje y ganado de las personas afectadas.